SÍNTESIS
El consumo es el componente con mayor peso en el producto interno del país. El análisis de su evolución resulta, por tanto, fundamental para comprender los cambios que se producen en nuestra economía y los efectos que las decisiones de política macroeconómica tienen sobre este agregado.
La cuarentena dispuesta para enfrentar el coronavirus llevó a paralizar ramas enteras de la economía lo cual profundizó la crisis de consumo por la que ya transitábamos. La caída en la evolución de las principales variables de consumo de Santa Fe parece no encontrar piso.
Analizamos en este informe las siguientes variables de consumo: Patentamientos de Automóviles, Ventas en Supermercados, Consumo de Cemento, Consumo de Energía Eléctrica, Créditos al Consumo e Índice de Confianza del Consumidor.
DESTACADOS DE PRENSA
La política de transferencias de ingresos del Estado Nacional se vuelca al consumo de alimentos. Si bien las ventas reales siguieron cayendo, dicha tendencia se desacelera por el incremento de las ventas nominales en un 55,7%. En marzo la baja fue del 6,7% interanual en la provincia de Santa Fe. El mayor impacto positivo se observa en el rubro “Artículos de limpieza y perfumería” (79%), mientras que el que más cayó fue “Indumentaria, calzado y textiles para el hogar” (-29%).
El patentamiento de autos en abril cayó a niveles inéditos: con las concesionarias prácticamente cerradas, se vendieron 381 unidades, 88% menos que el mismo mes de 2019.
La construcción paralizada. En abril las obras privadas de construcción estuvieron inhabilitadas y la obra pública prácticamente paralizada lo cual llevó a una caída interanual en ventas de cemento en Santa Fe del 64,7%, impulsada principalmente por la caída de la venta de cemento a granel (-89,6%).
El consumo de energía cae fuertemente promovida por el parate industrial y comercial. Mientras que el residencial cayó 1,4%, el de los Grandes Usuarios cayó 27,8% con respecto a abril de 2019.
Hasta el mes de abril, no se revirtió la caída en el uso del crédito personal: En abril hubo una caída interanual en todos los montos de financiamiento en términos reales. La caída más acentuada se ve en los Préstamos Personales (-60%), en segundo lugar los Préstamos Prendarios (-48%) y por último las Tarjetas de Crédito (-45%).
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