2/19/2012

ambientalismo y empresas mineras: el enemigo perfecto




En referencia a la cuestión minera, el denominado "ambientalismo" resulta para las empresas del sector , una paquetería que da encarnadura discursiva al "enemigo perfecto".

Compañeros y compañeras, con dolor observamos que Conciencia Solidaria y el compañero Noriega sin ir más lejos se hacen el juego a sí mismos, o sea, a la derecha, como lo hace todo el mundo opositor, of course. Psss!

En efecto, señalando normalmente sin rigor alguno el impacto ambiental de una actividad que puede responder por él y que a pesar de que su respuesta resulte más o menos satisfactoria, como en toda sociedad capitalista , su actividad productiva continuará con o sin daño ambiental, la discusión efectiva acerca de la tasa de ganancia realmente existente, niveles de tributación adecuados e incluso regulación  efectiva del inevitable daño ambiental, se omite .

Desplaza y sustituye el trascendente debate una interminable saga de combates televisvos entre supuestos especialistas o no tanto, aderezado con spots publicitarios donde cantan, bailan y lloran artistas de moda.

Agotador, en todos los países de la región el formato ambiental- melodramáticón es el mismo y ciertamente la discusión seria es una ausencia lamentable. Al respecto leemos a Zaiat:

La secretaria de Minería de la Nación estima que existen 2,3 millones de kilómetros cuadrados con potencial geológico apto para el desarrollo minero. El tipo de explotación de recursos naturales, su destino y la forma de apropiación de sus rentas extraordinarias son cuestiones clave del desarrollo. Del mismo modo que la tierra forma parte del bien común de toda la sociedad, los minerales ocultos que contiene la cordillera también son riquezas que forman parte del patrimonio colectivo. Esto implica que la intervención de las multinacionales en ambas actividades (minería y agro) no tiene diferencias porque el patrón extractivo es similar. 

En clave medioambiental, el cianuro y el glifosato aplicados sin controles y en forma desaprensiva provocan daños irreparables. Y en términos económicos, la necesidad de avanzar sobre la renta minera es tan relevante como la captura social a través del Estado de la renta sojera mediante retenciones. Por eso en este debate resulta orientador encontrar respuestas a lo siguiente: ¿cuál es la tasa de ganancia “normal” en esas explotaciones?; ¿shocks extraodinarios que disparan al alza el precio del mineral extraído no cambian las condiciones de la explotación fijadas por el Estado?; ¿cuál es el beneficio para la sociedad de poseer una inmensa riqueza natural, de cuyos frutos disfruta muy poco y sólo los recibe vía impuestos y empleos?; ¿cuál es la prudente estrategia financiera y de acumulación de reservas de un país con ricas áreas mineras donde se esconden abundantes reservas de oro?

Avanzar sobre esos interrogantes profundizaría el actual debate de la minería, para empezar a cuestionar el modelo de “economía de enclave”, que cuando agota el recurso natural es abandonada con consecuencias sociales y laborales. Ese patrón extractivo se supera cuando se diseñan políticas que incorporan a ese esquema productivo la elaboración local de las materias primas. En el caso de la minería, sería la etapa de procesamiento de los metales en refinerías. Esto exige fuertes desembolsos de dólares y mayores escalas, con demanda de trabajo de calidad al necesitar ingenieros, técnicos, investigadores. La tarea es construir los eslabonamientos necesarios entre recursos naturales, manufacturas y servicios. Incentivar así la innovación científico-técnica en cada uno articulándolos en torno de conglomerados productivos, incorporando a las pequeñas y medianas empresas, de modo que el impulso exportador refuerce la capacidad de arrastre sobre el resto de la economía y que los resultados de ese crecimiento se distribuyan con mayor igualdad. 

Este es el gran desafío de la actividad minera, como el de otras industrias extractivas, para ser parte del desarrollo nacional y no sólo un gran negocio para multinacionales...

4 comentarios:

Sote dijo...

Solo un detalle no menor Artemio. Es tan malo el modelo minero actual, que la ciudad de Andalgalá, que debería ser la más beneficiada por la explotación minera (se encuentra a 60 km de la alumbrera), está en emergencia económica, desde el año 2009, cundo Corpaci era vice gobernadora.

http://www.treslineas.com.ar/andalgala-declaran-emergencia-economica-n-154268.html

Desde Chivil dijo...

Obvio Sote sin el discurso ambiental la tasa de ganancia se mira y no se toca, gracias a todos los ambientalistas unitarios de derecha ahora se empieza a hablar de: Zaiat dixit "Este es el gran desafío de la actividad minera, como el de otras industrias extractivas, para ser parte del desarrollo nacional y no sólo un gran negocio para multinacionales..."
Lastima los reprimidos de Catamarca y Famatina.....Ah perdon no me di cuenta desde este medio le estoy haciendo el juego a la derecha....

Jorge Devincenzi dijo...

La cuestión, me parece, es quién pone la plata, porque se necesitan grandes inversiones. ¿La burguesía nacional?

Vigilancia Epistomológica dijo...

De la Sote (treta)?: el puñado de gente que mora en Andalgá ha sido pobre toda la vida, solo que ahora figuran en las tendenciosas estadísticas. Como me narró una vieja hippie nómade: en Guatemala vivían felices en harapos o como indios hasta que llegaron las progresistas ONGS y les hicieron ver que eran pobres. De ahí en mas los tipos empezaron a querer vivir adaptados al consumismo, y fué todo un desastre. Esto descontando por supuesto el Holocausto que hico la CIA anteriormente...