El panradicalismo debe resolver su dilema bonaerense, que supone que una fuerza que sobre el 40% del electorado total (ese es el peso electoral bonaerense a nivel nacional) no logra desplegar un candidato que mida más de 10% está ipso facto sin chances ningunas de constituirse en alternativa competitiva nacional. Para buscar una solución a este intríngulis parece encaminarse a incorporar un candidato todoterreno como Francisco de Narváez, hoy casi una franquicia, que en principio parece alcanzar el 17% de intención de voto en territorio bonaerense. No es mucho, pero es más que lo que tenía la UCR antes de la exótica alianza, aún eventual, dado que su candidata tradicional, Margarita Stolbizer, alcanzaba el 10% de las preferencias.
Desde el punto de vista de la ingeniería electoral, la decisión de los estrategas panradicales en apariencia suena lógica. Si se analiza el impacto político de la decisión de incorporar al candidato colombiano, las conclusiones son otras: da toda la impresión de que están bailando “sobre la turbina de Fukushima”, pero en lo inmediato hay elecciones y la lógica electoral es la que manda, al menos hasta Octubre así será.
Completa acá.
2 comentarios:
Y Sabatella algun voto radical va a conseguir de todo este mejunje. Llega al 10% comodo.
No le veo el negocio a los correligionarios ,la verdad que entre el PS y el Colombiano...por mas que el mormon les haya abierto la puerta igual...pura ganancia.Para Cristina digo la ganancia, no es que su electorado vaya a votar a el FPV pero van camino a pasar a ser aventados por el humo.No se entienden, cierto que pretenden captar una centro derecha vacante,pero¿un radicha votar al colombiano o un peroncho votar a un radicha?ni en pedo.
La logica hubiera sido atrincherarse con la sigla ir al muere y preservarse para el futuro.
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