cambio de estrategia y estado de opinión pública

Luego de una primera fase de construcción de vacío de poder intentando opacar la figura de Cristina exaltando las dotes de estadista de Néstor Kirchner que durante años negaron, y ante la evidencia que la condición de unidad política absoluta entre ambos , provocaba el efecto paradojal de que el reconocimiento de Néstor reforzaba ambas imágenes, el sistema de medios hegemónicos ha decidido clausurar los efectos del fallecimiento e iniciar la estrategia de campana de silencio y olvido.

Bajo la certeza de que todo pasa, aún los acontecimientos más importantes en términos emotivos finalmente ceden, sin embargo, el doble vínculo amoroso que constituyó como sujetos políticos a muchos de quienes participaron en la despedida a Néstor, el vínculo de amor personal hacia su líder muerto y el amor ya definitivo entre Néstor y Cristina , hará más persistente la reivindicación de ambos en parte de la ciudadanía , en especial los jóvenes , que la que supondría un simple y volátil estado de opinión pública, donde no se juegan lazos de afecto.

Esta circunstancia constitutiva del sujeto peronista en su modalidad kirchnerista, bajo un doble vínculo amoroso , permitirá construir aceptación con una persistencia e intensidad superior a la de un estado de opinión pública tradicional. Pero esta perspectiva de análisis soportada en el vínculo amoroso , implica una discusión teórica, muy típica de las formaciones populistas, que no daremos ahora.

Sin embargo, debemos convenir que estadísticamente en el gran número , la magnitud de la conmoción ira cediendo como fenómeno socialmente activo, o sea capaz de producir efectos de legitimidad , a nivel personal, no sabemos nada de lo que ocurre, no es nuestro tema, pero sí del lacanocookismo .

Pero aún cuando todo pase, queda sin embargo el recomienzo de la gestión de Cristina con este estado de opinión pública tan favorable y eso sí, la gestión del largo año por venir , será el factor clave para ya no lograr aumentar sino apenas sostener la imagen pública , de gestión y la intención de voto de magnitudes superiores que hoy manifiesta Cristina Kirchner que permitiría hoy un holgado triunfo en primera vuelta.

Es una gran diferencia cuali/cuantitativa respecto al pasado reciente, donde la primera minoría del FPV estaba aún en camino a cumplir el mito del 40+1 . No se trata ya tanto de aumentar, sino mantener niveles de adhesión y eso supone una estrategia distinta pero, por supuesto, de otro tipo de complejidad que la necesidad de crecimiento.

Compañeros y compañeras, veremos que sucede con este cambio de escenario notable, pero como siempre, su sostenimiento se define en la gestión y el ordenamiento electoral.

Efectivamente la necesidad de la etapa es ordenar distritos claves modificando el sistema de alianzas que se dibujó en el año 2009 , al tiempo que con gestión , intervenir sobre los sectores vulnerables. Sectores de la base ampliada de la pirámide social, que tradicionalmente votaron el proyecto justicialista que se desplegara centrado en la figura de Néstor Kirchner a partir del año 2003 y continúa hoy bajo la conducción unificada de Cristina, que en el año 2009 fugaron hacia otras alternativas , en especial en Buenos Aires, donde optaron por el hoy muy menguado peronismo disidente. Se verá.