10/26/2010

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Rescatando ya casi del olvido el asesinato de Mariano Ferreyra, lo que se discute en este momento es el posicionamiento político frente al acontecimiento, y eso también cesará rápidamente -así fluye la polítca en los medios- , leemos:

Mucha gente corre a buscar afuera de la escena del crimen de Avellaneda las verdaderas razones, corren a buscar los hilos ocultos. Se agarran del fantasma de largo brazo del duhaldismo que parece estar presente en todos lados. O le endilgan el crimen al gobierno, que no tiró una bala en siete años. Y terminan arrancando el cuerpo de Mariano para tirarlo simbólicamente en distintas mesas.

Como si las razones (equivocadas o no, como las de cualquier opción política) y el compromiso concreto de Mariano y su militancia no alcanzaran a explicar los hechos. Murió defendiendo algo en lo que creía. Y encontró su muerte en un límite que la democracia debe imponer y que creíamos impuesto después de las lecciones de la historia.

El resto, lo que está por afuera de la escena del crimen, es un debate que se da hoy al calor del chiquitaje. Los hechos irrumpieron fuertemente en la agenda política. La dirigencia, en general y a excepción de algunos casos particulares, ha decidido revolver el episodio junto con el resto de las frenéticas y pequeñas disputas diarias. La política se tira con todo lo que hay para ver quién saca un resto. En ese esquema, pierden todos y ganan unos pocos. Si hay una victoria, va para el sentido común y un relato imperante.

El resto es todo en detrimento del movimiento obrero organizado y la militancia política, históricos blancos de ese relato que busca su desprestigio, justo cuando esos actores vienen reconciliándose con la sociedad. Esa es la cuenta que hay sacar para entender dónde hay oportunismo en el debate político: quién gana y quién pierde. Ganan los sectores conservadores, los que pretenden que nada cambie nunca.

Post completo acá.

7 comentarios:

em dijo...

Es cierto que hay una ofensiva patronal que busca aprovechar la crisis para erosionar el poder sindical, especialmente del moyanismo. Esa ofensiva debe ser enfrentada. Pero esto no significa, como proponen los medios kirchneristas, reivindicar al moyanismo contra las burocracias supuestamente más rancias. El conjunto de la burocracia sindical, moyanista, de los “gordos”, azul y blanca, o de la CTA, erosiona el poder de los sindicatos al retacear representación de los contratados y tercerizados, y al dejar pasar los ataques patronales, como volvió a suceder hace pocas semanas en el caso de Paraná Metal. Por eso, por más que a defensores de un aggiornamiento moderado del actual modelo como Julio Godio les parezca una estupidez, una verdadera defensa de los sindicatos pasa por pelear por echar a la burocracia sindical para transformar a los sindicatos en herramientas fuertes para la lucha que impulsen la unidad de los distintos sectores fragmentados de la clase trabajadora, la democracia obrera y su independencia política del peronismo y los demás partidos patronales.

http://puntoddesequilibrio.blogspot.com/2010/10/kirchnerismo-y-burocracia-sindical.html

cansarnoso dijo...

"Rescatando ya casi del olvido el asesinato de Mariano Ferreyra"

lenta de reflejos (96 horas), cuando se rebela la propia tropa (wainfeld), cristina salé a defender al inepto de alak (virtual cuasi ministro)

si alak trasnochó el jueves (krish dixit), es porque durmió la siesta el miércoles al mediodía
e impotente
dejó hacer la zona liberada

renuncie ñokazzo ya

Tomás Münzer dijo...

Artemio, leyendo algunas notas y comentarios como el de cansarnoso uno puede ver que después del hecho quieren hacer el golpe de mano y cambiar la correlación de fuerzas al interior del Min. de Justicia, ahora, siendo platense no le tengo mucha estima a Julito, pero me hace ruido quiénes le piden la renuncia, así que no sé si sería un paso adelante o atrás, depende a quién pongan claro, por eso pregunto, qué pito toca Alak???

Anónimo dijo...

Basta de fingir dolor, basta de
inventar broncas, son todos unos hipócritas que pague el que tiene
que pagar sea quien fuera.
Ahora son culpables los unos y los
otros, dejense de joder se veía
venir se estaba removiendo demasiada
basura.
Ahora el bañero de Banfield se caga
de risa escondido detras de su
socio Magnetto, Kirchner se tiene
que dejar de hacer el buenito y
sacar las garras para defender
el modelo que quieren destruir
con un muerto.

fernando dijo...

el pobre pedraza justo, justo estaba "reconciliandose con la sociedad" cuando le tiran este fardo, pobre hombre

Plan de Gestión Federal dijo...

Nunca un trabajador votaría a una dirigencia que contrata a asesinos.
Más allá del tema penal no se puede hacer otra cosa que pedir democracia sindical. Los "gordos" se depurarán solos.
Si pedimos que se democraticen los medios de comunicación no sé por qué es tabú pedir que las leyes y las instituciones democraticen a los gremios. Se evitarán los asesinatos y hasta se incluirá a los que están afuera de todo convenio. Dirigentes que están atados a sus sillas nunca romperán este status quo.

perros dijo...

Y encontró su muerte en un límite que la democracia debe imponer

???????????????? !!!!!!!!!!