hacia dónde va esto?

Tal cual estan planteadas las cosas, no parece cercana la solución a las causas del paro agropecuario que son sí o sí implementar un cambio en el modelo económico que desarrolla el gobierno nacional plebicitado hace cinco meses en la urnas , exigiendo una baja en las retenciones hasta volver a los niveles del 11 de marzo pasado. El gobierno no concederá este punto y todo lo demas que oferte, lamentablemente no parece suficiente para resolver el conflicto. Por otra parte sucede que precisamente la exigencia de baja en el nivel de retenciones a nivel universal es la que mantiene unida a las distintas representaciones del sector, universalidad que en el gran número y dado el nivel de concentración de la actividad supone beneficiar en una proporción de 8 a 2 a los grandes aglomerados . La cuestión reside entonces en observar al menos tres cuestiones :

1. Hasta dónde se sostienen los múltiples cortes de rutas y en particular la visibilidad mediática de los mismos, si el conflicto se extiende sine die.
2. Cuando y cómo el conflicto gira hacia otras formas que la original protesta en la ruta y se desplaza hacia la confrontación típica del desabastecimiento, saqueos y violencia urbana, en particular en el GBA, escenario inevitable para un país que , producto de su falta de políticas regionales, como las que en parte también se expresan en este paro agropecuario, ha concentrado increíblemente al 30% de su población, sobre apenas el 3% del territorio nacional.
3. Cómo recupera cada actor el tipo de confrontación social y política que necesriamente abrirá de concretarse este nuevo escenario de violencia , en particular la presión que sobre las agrupaciones del campo y sus dirigentes habrá de instalar una eventual escalada del conflicto urbano . Por otra parte está en juego como nunca antes, la capacidad o no del gobierno nacional para disciplinar estructuras territoriales, en particular la liga de intendentes y gobernadores bonaerenses, frente a una escalada del conflicto urbano especialmente en el GBA.

La situación actual pareciera de empate , aún con gran visibilidad mediática del conflicto instalado exclusivamente en las rutas y un nivel módico de violencia - escaramusas en los cortes entre manifestantes y camioneros , trompadas aisladas en manifestaciones de la ciudad y el conurbano y apenas conatos de saqueos en el conurbano, sofocados por control territorial de los intendentes- . Cómo se desarrollará esta coyuntura actual si se concreta el - para casi todos - fracaso de las negociaciones es incierto, pero seguramente no se permanecerá mucho tiempo más en este equilibrio inestable y se conformarán nuevos escenarios donde la eventual violencia no permanezca encapsulada en los piquetes ruteros y se desplace hacia el GBA.