7/04/2015

mmm... con m de macri ...


Una encuesta revela un alto grado de aprobación y de confiabilidad en el nuevo sistema, pero también un bajo nivel de capacitación.


Tres de cada diez porteños que este domingo entren a un cuarto oscuro lo harán con un alto grado de desconocimiento sobre el nuevo sistema de Boleta Única Electrónica, que la Ciudad de Buenos Aires aplicará por primera vez para la elección de jefe de Gobierno. Según un sondeo realizado entre el miércoles y el jueves, a apenas algunos días de los comicios, el método debutante igualmente goza de un importante nivel de confiabilidad. Sobre todo al medir transparencia y posibilidades a todos los frentes políticos que lograron pasar el filtro de las PASO.

La encuesta fue realizada sobre 900 casos por la consultora Trespuntozero. El primer dato que arroja es casi el 93% de los consultados –vía telefónica- manifestó estar al tanto de que, a diferencia de las primarias del 26 de abril, en las elecciones del domingo debutará el sistema electrónico, idéntico al que ya utilizó este mismo año Salta. Pero el cuadro se acompleja cuando el 30,4% de los encuestados afirma estar “poco” o “nada” familiarizado con la nueva implementación electoral. Además de un 6% extra agrupado en el siempre presente “no sabe”, que podría engordar aún más los niveles de desconocimiento.

El 25,5% dijo estar “muy familiarizado” con el sistema que se usará por primera vez en la historia de la ciudad. Mientras que un 38,1% se anotó entre los que están “algo familiarizados”. Entre los dos, suman el 63,6% de los consultados. Estos índices de acercamiento al sistema crecen cuando se hace un análisis más fino: trepa al 67,8% en el estrato de entre 16 y 29 años y al 68,8% entre los consultados con estudios universitarios completos.

Sin embargo, el 38,2% de los mayores de 51 años manifestó su desconocimiento a la hora de pararse frente a las maquinitas. Y lo mismo respondió el 32,4% de los encuestados que sólo completaron sus estudios primarios.

El mismo trabajo avanzó sobre los niveles de aceptación del salto de la boleta sábana en papel al sistema electrónico. El 66,4% estimó que “el voto electrónico da a todos los partidos las mismas chances”; y el 63,4% confía en que “el voto electrónico hace que las elecciones sean más transparentes”.

Salta viene utilizando la Boleta Única Electrónica desde 2009, en forma gradual, hasta su aplicación plena en las elecciones de 2013. Para los comicios del pasado 17 de mayo, a la provincia norteña llegaron varios veedores internacionales para realizar un seguimiento de los comicios y del escrutinio. Casi todos coincidían en que la decisión de la Ciudad de aplicar la boleta electrónica en el pleno del distrito con poco más de un mes para su publicidad y la capacitación del electorado era un error.

La empresa que realizó la encuesta cuenta entre sus clientes a varias dependencias en manos del macrismo, como el Gobierno de la Ciudad, el Banco Ciudad, el ministerio de Espacio Público porteño, el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC) o el Ente de Higiene Urbana, pero también organismos como la Anses o la Agencia de Seguridad Vidal del Ministerio del Interior o empresas en manos estatales, como YPF.

Nota Complementaria

Con los chips de punta por la falta de control

Lo comprobaron, le advirtieron al gobierno porteño, no les hicieron caso y ahora denuncian que es muy fácil “apilar” votos con un programita y un smartphone. Recomiendan contar a mano las boletas y no confiar en los chips.
Son expertos en seguridad informática, asesoran entidades de primer nivel en el país y en el exterior, se conocen de hace tiempo. Como en los viejos tiempos, volvieron a reunirse y como en un juego hurgaron en las medidas de seguridad del sistema de voto electrónico que contrató la Ciudad de Buenos Aires y que debutará –sin experiencia previa de los electores– en la elección de mañana para elegir al nuevo jefe de Gobierno. Allí descubrieron que el sistema de recuento de votos de las máquinas que usarán los porteños puede ser adulterado a través de un celular y con un código al que ellos lograron acceder pero que, preocupados, no difundirán hasta luego de la elección. Quienes dieron a conocer este “error” en el sistema de seguridad de la empresa Vot.Ar afirman que comprobaron en la práctica que esta adulteración es posible cuando la Ciudad sacó a las calles las primeras máquinas para la capacitación y adaptación de los ciudadanos al nuevo sistema de votación. Por eso aconsejan a los presidentes de mesas y fiscales usar la vieja metodología del conteo y control manual –“calculadora en mano”– de la cantidad de votos emitidos para certificar que sea el mismo que arroje la máquina, que luego, a través de los chips de cada voto, enviarán los datos para un más rápido recuento provisorio.

1 comentario:

tiovik dijo...

...una tablet o un celular de mediano porte (algo mas potente que un S3 por ejemplo). Añádale un equipo de los que se usa para grabar RFID. Un pack de baterías para alimentar el chisme y conocimientos medianamente razonables de programación. Según me comentan los que trabajan con RFID solo necesitas 5 metros de separación para que sea efectivo. Todo el trasto cabe en una mochila o un bolso de tamaño típico. Con estos datos ya saben a que deben estar atentos los fiscales y la seguridad del comicio. Igualmente recontar y recontar, como dicen los rusos: "confia pero verifica"...