Tras
observar que su despliegue electoral nacional estaba en duda, Mauricio Macri
decidió volver a posicionarse con fuerza en
el espacio que mejor volumen de Usuhaia a La Quiaca le había brindado a su figura: Boca Juniors.
Sosteniendo
en las pasadas elecciones a Daniel Angelici, empresario del juego y puntero
judicial del PRO en la ciudad, logró empinar a su pupilo en la presidencia del
club que reúne al 40,4% de los hinchas argentinos, según el ya clásico estudio
nacional realizado por Consultora Equis, que se resume en el cuadro que
acompaña este post (click sobre la imagen para agrandar).
Boca Juniors es el equipo de fútbol más popular y poderoso en materia de visibilidad en toda la geografía nacional, en especial sobre los sectores populares, donde atrapa el 44% de las preferencias, un 10% por sobre su promedio nacional.
Así las cosas, uno de los escollos históricos de Mauricio Macri en el club de la Ribera fue Román Riquelme. En efecto, tal como Carlos Bianchi no soportó los métodos de “hijo de papá” que trataba de imponer Mauricio en su gestión en Boca, lo que motivò su renuncia en aquella ya memorable conferencia de prensa que dejó pagando a Macri frente a los sorprendidos periodistas, tampoco Riquelme, el ídolo máximo en toda la historia xeneise estuvo dispuesto a soportar el destrato del actual jefe de gobierno porteño, que, reiteramos, siempre intentó dejar fuera del club al glorioso “topo gigio”.
En
este contexto, más allá de los imponderables del fútbol, que no fue el caso de lo
ocurrido en el partido de vuelta contra el Corinthians, el invento macrista, el
empresario de los hasta hace poco subvencionados bingos bonaerenses
"Daniel Angelici", mostró sus enormes limitaciones de gestión y llegó
a Brasil sin resolver, o al menos siquiera contener, la evidente y prolongada
crisis interna del plantel.
Los
desencuentros internos, finalmente, se tradujeron en la muy pobre performance
futbolística del equipo, que, lejos de la mística boquense enfrentó la final de
la Libertadores con el mismo espíritu declínante que caracteriza en las tenidas
difíciles a su primo recientemente ascendido a primera división.
Hay
que decirlo, esa nefasta noche en el Pacaembú, bajo la inexistente conducción
de Angelici y un Falcioni más dibujado que los pronósticos de Prat Gay, ay!, Boca
fue River.
Sin embargo no fueron los conflictos, inevitables en los planteles futboleros, sino la ausencia de conducción del club, la absoluta responsable de esta afrenta a la historia boquense. Sucede que en materia de marketing dirigencial se inventa todo, salvo el atributo de autoridad asociado inexorablemente al respeto y la capacidad de gestión.
Angelici
carece fundamentalmente de atributos de autoridad, particularmente la capacidad
sancionatoria. Nadie le teme al presidente inventado, se lo sabe un chirolita
de Mauricio, por lo que, estructuralmente, esa conducción no respetada no puede controlar conflictos, mucho menos administrarlos, resultando incapaz de gestionar al populoso club de la
Ribera.
Los hinchas de Boca deben plantearse muy estrictamente cuàl serà el futuro del club bajo la conducción ineficaz de la actual dirigencia, cuyo fin implícito, pero no por eso menos evidente, no es mejorar la performance institucional y deportiva xeneise, sino servir de cabecera de playa al despliegue nacional de la figura de Mauricio Macri.
Fracasará muy probablemente Mauricio Macri en su intentona de nacionalización desesperada, pero podría no hacerlo Boca Juniors, si, bajo la presión del hincha genuino, se corrige el rumbo actual de colisión. De lo contrario, la decadencia parece inevitable, con o sin mística tribunera, que está sobradamente comprobado, resulta un insumo muy poco útil en estos casos de desmanejo dirigencial. Se verá.
2 comentarios:
´Bueno Artemio,yo soy de Ríver-no soy impoluto-,hace unos días en el GDA anunciaban las glorias que vendrían para Boca y el delfín..Los éxitos lo proyectarían a MM a nivel nacional para la aventura del 2015..es un paso atrás .Más que por el Corinthians por el puterío instalado..Bueno el año que viene otra vez en la Copa..Sin Román?? con MM de pilo to de tormentas??.dudo, es riesgoso....
Si, da vergüenza ajena este ñato. ¿Vió como le clavaba la mirada a Riquelme? ¿Qué se comió, un Vincenzo Pantangeli?
http://images.wikia.com/godfather/images/b/bc/Vlcsnap-2010-02-25-20h33m45s220.png
Abrazo
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