5/21/2012

sanata y fe: torres (del sel)




El análisis habitual de Darío Schueri esta cargado de malas noticias: El rechazo a la reforma tributaria por parte de los cerealeros, el creciente retraso del tipo de cambio , enfriamiento de la economía , y el desarrollo del denominado "properonismo" de Torres del Sel con una intensidad inusitada. 

En fin , lo leemos manteniendo las ochenta pulsaciones en con dos módicas certezas : 


  1. Para la mala onda sobre la macro y las trabas a la reforma tributaria del pelado, esta que hace furor ahora mismo entre los editorialistas del Financial Times: "Siempre que llovió, paró" .   
  2. Para  el pro-peronismo , esta otra que utiliza el críptico Zaninni, cuando participa en la "mesa chica" santafesina analizando el futuro del ex (?) Midachi: "Torres más altas han caído"  .


Leemos a Schueri ?:

El técnicamente descrito enfriamiento de la economía argentina pondría en apuros la reforma tributaria de Bonfatti, toda vez que resulta más sencillo para la sociedad y las entidades trasladar los clamores a quienes están geográficamente más cercanos que enfrentar la pesada artillería nacional.

La Mesa de Entidades de la Producción de Santa Fe acaba de señalar que “actualmente la actividad económica se encuentra en un período de marcada desaceleración, con probabilidades de transitar una nueva fase recesiva en su ciclo económico”. Se basó en un pormenorizado informe del Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe.

El propio INDEC muestra una ralentización de la economía. La inflación carcome como el ácido los paritarios salarios; mientras de a poco se va esparciendo el “virus dólar”, no solo entre los tres millones de argentinos que lo atesoran a manera de ahorro o lo requieren para viajes de negocios o placer, sino entre quienes lo necesitan para pagar necesarias (y a veces imprescindibles) importaciones, generando entre el común de los fabricantes y proveedores psicóticas facturaciones al son del dólar “blue”.

Jorge Sobrero, presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Santa Fe sinceró que “hoy uno no sabe a qué atenerse; con los aumentos que tienen las escalas salariales nadie sabe a qué precio va a recibir el producto, más si después recibe el dólar de exportación a 4,41 por peso, mientras que acá se están comprando los productos con un dólar de 5,60 pesos. Por eso las operaciones comienzan a complicarse”.

La realidad supera los esfuerzos de los funcionarios nacionales por atajar la embestida económica, testificada en la memoria colectiva de manera célebre por Juan Carlos Pugliese, recordado Ministro de Economía de Raúl Alfonsín en aquel memorable “sincericidio” luego de una reunión con el especulativo establishment: "les hablamos con el corazón y nos respondieron con el bolsillo", profetizó. Pugliese reveló el genotipo social argentino que nunca confió en su economía. Porque nunca confió en sus políticos. La sociedad vive el hoy y se aferra providencialmente al sobrenatural, sin importar Credos, “Dios Proveerá”.

En ese mar embravecido: la reforma santafesina.
Con semejante - real o insinuado – estado de cosas y un pronóstico subyacente de mar peligroso, el Gobernador Antonio Bonfatti busca su Isla del Tesoro: la reforma tributaria; para ello deberá ajustar detalladamente cada uno de los instrumentos de la nave si no quiere encallar.

En el mientras tanto, la emisión de Letras por hasta 556 millones de pesos (se arrancará emitiendo lo justo y necesario porque hay que devolverlas el 30 de Noviembre) para saldar deudas con proveedores y contratistas del Estado le permitirá atravesar el supuesto oleaje con cierta protección mientras espera el incierto desenlace de la necesaria reforma tributaria que su antecesor Hermes Binner intentó conseguir sin suerte en un escenario económico menos crítico. Binner falló en los modos con un Parlamento numéricamente favorable.

Bonfatti tiene que extremar la diplomacia de la cual careció el actual líder del FAP. Para ello llevó a su extenuante y prolífico (así lo hacen notar los empresarios que lo acompañan) periplo por Medio Oriente y Alemania a Luis Rubeo, presidente de la Cámara de Diputados y líder del subgrupo mayoritario de diputados peronistas, y los titulares de los dos sub-bloques peronistas de senadores: José Baucero y Armando Traferri. Extensas horas de vuelo, lobby de hoteles y salas de embarque en aeropuertos seguramente habrán servido para aceitar los consensos.

El Gobernador allá lejos trata de hilvanar el número parlamentario que a Binner le sobraba y desperdició. En la Casa Gris el trabajo de ebanista lo hace el Jefe de Gabinete Rubén Galassi instruyendo políticamente, cual técnico que se juega el título o la permanencia en la categoría, a los funcionarios de Economía encargados de explicar a quien lo requiera los detalles de la reforma apelando a las virtudes teologales paciencia y sabiduría.

Mientras se consigue el número necesario de manos peronistas levantadas en el Parlamento, habrá que lidiar con las desconformes “fuerzas vivas” (llámese entidades de la multisectorial productiva, comercial y de servicios) aún con sus desopilantes internas como las de la Unión Industrial de Santa Fe (que desautorizó a su Presidente Norberto Velazco con un comunicado que firmó ¡¡el propio Velazo!!, por haber adherido al documento de la Mesa de Entidades de la Producción) que hacen equilibrio en las alturas cual trapecista del Cirque du Soleil para no caer en el cerrado discurso político de algunos legisladores de la oposición,

Los dirigentes sectoriales, sobremanera del campo, ya comienzan a hacer ruido, a pesar de que los funcionarios de la Subsecretaria de Ingresos Públicos aseguran que sus didácticamente fundadas explicaciones sobre progresividades, unidades productivas coherentes con el territorio, valuaciones y costos de la tierra, son recibidas en reuniones más privadas con respetuosa atención y atendibles sugerencias que suelen no ser bien vista por algunos paren que abonan la equivocada teoría de que la representatividad gremial empresaria no es genuina si comparte pareceres con el gobierno.

Naturalmente que siempre resulta mas cómodo oponerse; más aún si se trata de aumento de impuestos. A nadie le gusta pagar (cuando de tributos o servicios se trata) y argumentos en tal sentido sobrarán, ya sea en bíblicos tiempos de vacas gordas o vacas flacas. Y se los van a dar gustosamente a los senadores justicialistas encabezados por Alcides Calvo que iniciarán una ronda de consultas con las cámaras patronales agropecuarias y entidades de la producción con la sutil intención de asimilar las quejas para después deslindar responsabilidades a la hora de oponerse. Y de paso dejar en evidencia a los pares que puedan simpatizar con la Ley.

El “Properonismo” y el “Sciolismo” quieren hacer pie en Santa Fe.

El “properonismo” y el “sciolismo” a la caza de peronistas díscolos, resentidos y renegados.
La tímida irrupción del “sciolismo” en la Provincia de Santa Fe (inaugurada oficialmente por el Gobernador bonaerense en marzo último con su presencia en esta capital) podría llegar a generar, en caso de consolidarse, una reagrupación militante justicialista no kirchnerista que podría llegar a esmerilar las aspiraciones conquistadoras del ascendente PRO, sobremanera entre Los Sin Techo, muchos de ellos otrora reutemistas huérfano de liderazgo.

Por ahora la artificiosa corriente “sciolista” solo se limita a exploratorios contactos entre amigos militantes en común, esperanzados llamados telefónicos y algún legislador con buen caudal de votos territorial que cauteloso y reservado nos confió que esta comenzando a jugar en ese espacio. Lo cierto es que Sciolie, caso de jugar, libraría a más de un peronista del sentimiento culposo de tener que apoyar a un no peronista como Macri en reemplazo de Cristina Fernández. Pero deberán esperar para desenvainar: Prudentemente exasperante en el manejo de los tiempos, difícilmente Daniel Scioli le arme lista al FPV el año que viene en Santa Fe.

PRO peronismo en marcha. Dolor de cabeza para el “nuevo” PJ

Mientras tanto, en la Provincia el PRO comienza a moldear su masa crítica territorialmente representativa de cara a las legislativas del año que viene, y aunque están en etapa de construcción, ya están siendo infectados por el virus internista.

Por un lado los “históricos” peronistas aliados como el diputado Norberto Nicotra que trabajan para consolidar una base lo más amplia y políticamente posible conformada por radicales prestigiosos y peronistas representativos, tendiendo puentes con el actual diputado nacional Daniel Germano o el mismísimo Ricardo Spinozzi, que el Domingo 27 dejará la conducción y principales líneas del PJ en manos del FPV que amenaza con desafiliar a quienes se asocien y se hayan asociado con el PRO.

Del otro lado, nostalgiosos dirigentes del peronismo rosarino con ansias de volver a jugar en primera
que este sábado le armaron a la cúpula del PRO el desembarco nacional en Rosario. Llegaron desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires referentes de la guardia real macrista tales como Emilio Monzó (Ministro y armador nacional del PRO) el Jefe de Gabinete Porteño Horacio Rodríguez Larreta, el Ministro Diego Santilli, el diputado nacional Jorge Triaca, el vicepresidente primero de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, Cristian Ritondo entre otros no menos representativos. Entre los presentes estuvo el ex diputado Adrián Menem; el senador bonaerense Alfredo Meckievi, además de referentes de Córdoba, Chubut y Entre Ríos, y dirigentes porteños como el comunero Maximiliano Corach. Gustavo Ferri, diputado bonarense y yerno de Eduardo Duhalde, no pudo llegar pero mandó una adhesión

Cerró el numeroso acto Miguel Torres del Sel con un encadenado discurso que seguramente alegró a los profesionales de la porteña Fundación Pensar a la cual supo acudir semanalmente para terminar de moldearse como político. Nivel de conocimiento, carisma y votos ya tiene; el objetivo del PRO es seguir puliendo el diamante para que, junto con el armando provincial relatado, vuelva a sorprender el año que viene en las legislativas nacionales encabezando la grilla de diputados nacionales.

1 comentario:

Polito dijo...

Tremendo lo que narra de Torres del Sel su columnista Sanata fesino.
Da como un hecho que Miguelito "terminó de moldearse como político" al dar un discurso "encadenado".
Tal vez, quiso expresar que al enano de midachi no se le salió la cadena con alguna frase racista acostumbrada, como, "las vaguitas en los pueblos se embarazan a los 11 años, para cobrar el subsidio".
Rodeado de luminarias del duhaldo-menemismo residual, que rindieron 5,8% en las últimas presidenciales, Torres del Sel es un diamante, bruto, a punto de ser pulido nos dice Schueri.