En síntesis bien peroniana es que unimos este lindo videíto de apertura apologético de TBA aparecido no hoy (jejeje), en La Nación, con esta nota fulería sobre TBA, aparecida si hoy (jejeje), en Miradas al Sur, que ya leemos:
Desde hace más de tres años comenzaron a inaugurarse los coches Puma V3. Son trenes de color azul y con el techo gris. Tienen, según la página web de TBA, control de patinaje durante el arranque, convertidor elástico para la alimentación de servicios auxiliares y elementos de confort como aire acondicionado frío-calor. De las 25 formaciones que tiene el Sarmiento, hay 8 que ya tuvieron alguna reforma de este tipo. Dentro de esas ocho, hay cuatro que cuentan con vagones de dos pisos. Aunque el aspecto de los trenes es bastante más moderno, los trabajadores sostienen que es “pura pinta”.
“Los vagones nuevos se hicieron reformando los viejos Toshiba que son de fines de los ’50 y principios de los ’60. No está mal en sí mismo reformar un coche que ya se usó. El tema es cómo se hizo”, dijo José Sebriano, que trabaja en el área de señalamiento y comunicaciones del Sarmiento. “Se usaron todas tecnologías diferentes –agregó–. El equipo de frenado es sueco y el circuito eléctrico brasileño. Se supone que un sistema ferroviario tiene que apuntar a lo contrario, a estandarizarse para que todo sea más fácil.” El delegado agregó que “los vagones de dos plantas se construyeron cortando el Toshiba y sacándole el motor para poder bajar el piso. En las formaciones que tienen esos vagones, la tracción no la hacen todos los coches, como era antes, sólo los que no se remodelaron traccionan. También cortaron el techo para subirlo.
Un descarrilamiento de uno de esos vagones puede ser muy peligroso porque el piso del vagón va casi al ras de las vías”.
Estas remodelaciones se hicieron con financiamiento del Estado Nacional. La empresa que tiene la adjudicación es Emprendimiento Ferroviarios S.A (Emfer). La firma es propiedad de grupo Cirigliano, el mismo concesionario del ferrocarril Sarmiento. El presupuesto para remodelar todas las formaciones, que hasta ahora se ejecutó sólo en parte, es 1.090 millones de pesos.
Sebriano –se dijo– trabajaba en señalización. Sobre cómo funciona esa área del Sarmiento, sostuvo que “el sistema que tenemos no está unificado. Desde la estación de Once hasta Liniers funciona un sistema inglés que es de 1930. De Liniers a Moreno hay un equipo francés y fue incorporado en 1980. Estas diferencias producen los mismos conflictos que la mezcla de tecnologías en los vagones”. El delegado dedicó unas líneas también a las condiciones de trabajo. “Si tenemos que hacer un arreglo entre Once y Caballito debemos ir caminando por las vías porque no hay un medio de transporte para llevarnos.”
¿Qué hacer? El diagnóstico de los trabajadores agrupados en la Unión Ferroviaria sobre el funcionamiento del Sarmiento y de los ferrocarriles es claro. La pregunta entonces es: ¿qué hacer? Mónica Slotauer, delegada del área de limpieza, habló con este semanario y fue taxativa: “No hay modo de mejorar la situación hasta que el grupo Cirigliano deje la concesión. Eso es lo primero y más importante. Es el puntapié inicial para cualquier cambio”...
2 comentarios:
Quizás suene un tanto facilista pero... podemos hacer reactores nucleares y satélites y no podemos hacer trenes?
Me suena raro, acá se podría reactivar esa industria y con los talleres que ya hay la puesta en marcha no debería tomar mucho tiempo.
"no hay modo de que mejore la situacion hasta que el grupo cirigliano deje la concesion".OK.
Pregunto,Cirigliano con quien hacia los negociios,con sub secretarios,secretarios,ministros del gobierno nacional o con Magnetto??
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