2/22/2012

fútbol y dictadura: nunca es triste la verdad





Jorge Rafael Videla deberá volver hoy a los tribunales federales, donde será indagado por trece casos de secuestro y torturas cometidos contra ciudadanos peruanos en el marco del Plan Cóndor. Mañana será el turno de su ex ministro del Interior Albano Harguindeguy. El juez federal Norberto Oyarbide citó a los represores para interrogarlos sobre lo sucedido a un grupo de opositores a la dictadura de Francisco Morales Bermúdez detenidos inicialmente en su país por militares peruanos y luego trasladados a la Argentina, donde estuvieron detenidos ilegalmente en Jujuy y Buenos Aires. Entre las víctimas había dirigentes políticos, sindicalistas, un periodista e incluso integrantes de la marina.

Los peruanos fueron secuestrados el 15 de mayo de 1978 en su país y, tras recibir una golpiza, fueron subidos a un avión que los trasladó, engrillados, a la provincia de Jujuy. Allí los llevaron al Regimiento de Infantería de Montaña Nº 20, donde les informaron que eran “prisioneros de guerra”. Los presionaron para que firmaran un pedido de asilo político, y como se negaron los mandaron a Coordinación Federal, en Buenos Aires. Finalmente fueron expulsados a terceros países.



Ahora que en el Perú se ha vuelto a hablar del tristemente célebre Plan Cóndor, a raíz de una orden de captura que dictó un juez argentino contra el expresidente de facto Francisco Morales Bermúdez, otro hecho, esta vez deportivo y de ingrata recordación para los peruanos, ha sido vinculado con este tema.

Se trata del polémico partido que le permitió a la selección argentina acceder a la final de la Copa del Mundo de 1978. Sobre el resultado, 6-0 a favor de los anfitriones, se han tejido muchas versiones.

“El exsenador peruano Genaro Ledesma Izquieta declaró ante el juez argentino Norberto Oyarbide. Había sido secuestrado y trasladado a la Argentina junto a otras 12 personas. (Jorge Rafael) Videla había aceptado recibirlos como prisioneros de guerra a cambio del resultado”, señala el diario “Tiempo Argentino”.

“Videla necesitaba ese triunfo para limpiar la mala imagen de Argentina en el mundo”, agrega el matutino. Según la declaración de Ledesma, el resultado de aquel partido fue producto de un pacto entre Morales Bemúdez y Videla en el marco de dicha operación, que era un instrumentó para asesinar y desaparecer a miles de opositores a las dictaduras de Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay.

2 comentarios:

Daniel dijo...

Yo digo; cómo hicieron los peruanos para pegar un tiro en el poste y otro que pasó a milímetros -ambos con el arquero vencido- y cuando iban cero a cero.

Zaitsev, el Francotirador dijo...

Que bueno ocuparse de los temas de actualidad.
Está faltando la nota de color sobre la gestión de transportes en el mejor gobierno de la historia, del Big Bang en adelante. No?