Leemos: En el tercer trimestre de 2010, los hogares más ricos tuvieron ingresos 17 veces superiores a los más pobres. Hace un año, la brecha era 18,3. Además, hubo recuperación del empleo y la AUH, claves para achicar el segmento.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) informó ayer que el 10% de las familias de menores recursos recibieron en el tercer trimestre de 2010 ingresos que son, en promedio, 17 veces menores a los del 10% de los hogares más ricos ($ 764 contra $ 12.988). Si bien la desigualdad permanece en niveles altos, representa un avance frente al mismo período del año pasado, cuando la distancia que separaba a dichos segmentos de la población era de un ingreso 18,3 veces mayor.
En este sentido, la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que presentó la autoridad estadística señala que los hogares con menor nivel de recursos tuvieron, en promedio, un avance en los ingresos equivalente al 32,4%, en comparación con el mismo período de 2009, pasando de $ 577 a $ 764.
“Desde la recuperación de la democracia, hoy debemos estar en el mejor nivel de distribución del ingreso. Lo que hubo en los últimos períodos es una transferencia hacia los sectores medios a través de la recuperación del empleo formal, a lo que se suma, lógicamente, la mejora salarial lograda en los diferentes sectores”, explicó a Tiempo Argentino el sociólogo Artemio López, titular de la Consultora Equis. Para López, otra de las claves tiene que ver con las políticas sociales implementadas el último año. “En los sectores de menores ingresos han tenido impacto las mejoras producidas por la Asignación Universal por Hijo”, indicó.
Según la medición del Indec, en julio–septiembre pasado el coeficiente de Gini fue de 0,400, frente a 0,406 en el segundo trimestre y a 0,404 en el tercer trimestre del año pasado. Para el universo de personas, el indicador muestra un progreso interanual (0,448 en el último registro, contra 0,460 cuatro trimestres atrás), si bien se exhibe un retroceso frente a abril-junio pasado (0,442).
Como en el caso de los ingresos, el coeficiente de Gini se ubica en la actualidad bien lejos de los niveles superiores a 0,5 exhibidos en 2003-2004, cuando la economía se estaba recuperando del estallido de la convertibilidad. En el tercer trimestre de 2003, el indicador se ubicaba en 0,53, lo que significa un nivel alto de desigualdad.
Efectivamente hay dos factores claves que explican las mejoras distributivas . El impacto sobre segmentos medios que supone la recuperacion salarial formal combinado con el impacto de la Asignación Universal por Hijo en los tres primeros deciles de ingreso.
La combinación de ambos mecanismos permite la mejora en el índice de concentración de GINI que se ubica por debajo de los valores del año 1994 y de la brecha polar entre el 10% más rico y más pobre de los perceptores de ingreso que hoy asciende a 17 veces, ubicándose en 28 veces antes de la AUH y en 32 veces en medio de la crisis de 2002. Los troscos lo hicieron.
Gráfico de apertura, obtenido de este blog.
4 comentarios:
Artemio,.como incide la alteración estadistica del Indec en el coeficiente?
Dificil de responder, la imputación anómala de ingresos no
está muy definida e identificada por nadie seriamente. No descarto esa chance, pero no dispongo de datos alternativos , como en el caso del IPC. Por lo tanto lo tomo, igualmente antes de la inteervención de 2007, ya el GINI había mejorado en la tendencia que muestra este nuevo dato. Por eso no me parece erróneo conceptualmente este post y la data del INDEC. No podría afirmar ni negar nominalmente la exactitud de esos valores, eso es así.
salu2!
"no afirmo ni niego" jajajaja
Pero en el post ninguna mención al respecto, alguien te lo tiene que preguntar (y cuando te reenvíen por la blogósfera K, los comentarios no los reenvían). Well done.
¿Y si lo hicieron los troskos? No sé, vos dirás. Por citar algo, los planes sociales de Duhalde se consiguieron con los troskos en las calles, mientras por esos días Kirchner en Su provincia reprimía a los caceroleros con sus patotas. "VAMOS A CORRERLOS!!" te acordás? Shhhh...
Artemio, hay mucho "efecto crecimiento" y poco efecto política redistributiva en los resultados. No por nada plantean que Leonardo Gasparini y Guillermo Cruces, del CEDLAS que la mejora social es “no muy diferente de la experimentada por cualquier economía que se estabiliza después de una crisis macroeconómica profunda. De hecho, la caída de la desigualdad entre 2003 y 2006 es muy parecida a la caída entre 1990 y 1993 después de la híper de 1989/90”. Por otro lado, comparada con otros momentos como los años menemistas 96 o 97 que muestran un coeficiente similar al de 2006, lo llamativo es que no haya bajado más el coeficiente considerando el fuerte crecimiento del empleo. Y ésto, tiene que ver con la estructura precaria del empleo creada. No por nada un economista no muy lejano a la orientación del gobierno como Fernando Porta señala que “la estructura productiva argentina genera tendencias regresivas para la distribución del ingreso” (Porta, Fernando, “No se ve nada nuevo”, El economista, Buenos Aires, 4/6/2010). La precarización y tercerización que este gobierno sostuvo todos estos años y defiende (ni siquiera las anunciadas incorporaciones como trabajadores de planta de los tercerizados en el Roca se concretan, mucho menos en otros sectores) con nuevas leyes como la de Recalde, contribuyeron a poner techo a la recomposición.
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