7/30/2009

el ipc en disneylandia: hoy pluto

A propósito del "poder plutocrático mundial " oculto detrás del viejo IPC, cuyo sesgo cruel sería responsable teórico de que la inflación oficial actual medida con el "nuevo"IPC, represente apenas 1/3 de la anterior (!) , leemos:

Plutocracia (del gr. πλουτοκρατíα, gobierno de los ricos). Preponderancia de los ricos en el gobierno del Estado. Predominio de la clase más rica de un país.

Democracia (del gr. δημοκρατíα). Doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno. Predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado.

Demagogia (del gr. δημαγωγíα). Práctica política consistente en ganarse con halagos el favor popular. Degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.

Entre los distintos argumentos que las autoridades intentaron esgrimir para justificar la injustificable destrucción de las estadísticas públicas, y en particular del Índice de Precios al Consumidor, está el pseudo metodológico referido a un supuesto sesgo plutocrático del IPC.

Plutocrática es una de las maneras en que se puede llamar a la forma en que se construyen las estructuras de gastos (es decir, la distribución del gasto total entre distintos grupos de bienes y servicios) que determinan la ponderación con que cada producto participa en el cálculo del índice.

Las estructuras “plutocráticas” surgen de sumar el gasto del total de los hogares en cada bien o servicio, y dividirlo por el gasto total del conjunto de los hogares. De esta manera se obtiene una estructura promedio, que representa el peso que cada artículo tiene en el gasto total. El nombre surge del hecho de que, con esta fórmula, los hogares pesan según su nivel de gasto en la estructura promedio. Es decir, mientras más gasta – más rico es - un hogar, más va a incidir su estructura de gastos en la determinación de la estructura promedio.

En este discurso, las estructuras “plutocráticas” aparecen contrapuestas a las estructuras “democráticas”, que consisten en calcular, a nivel de cada hogar, la participación de cada gasto en el total, y luego hacer un promedio del porcentaje que representa cada uno. En este caso, el nivel de gasto de cada hogar no incide en el peso que éste tiene en la determinación de la estructura promedio, por lo que los hogares que menos gastan – los más pobres - estarían mejor representados. Si las estructuras de gasto se calculan de esta manera, el resultado parece mostrar una situación en la que el bienestar de los hogares es menor: mientras más pobre es una sociedad, mayor es el porcentaje del gasto total destinado a alimentos, y menos lo que puede destinar, por ejemplo, a esparcimiento o educación.

    El “sesgo plutocrático” del que se habla se refiere, entonces, al hecho de que en esas estructuras están mejor representados los hogares que más gastan. Ambos tipos estructuras son indicadores válidos, que muestran cosas diferentes. Mientras que las estructuras “plutocráticas” indican la forma en que se distribuye el gasto agregado de las familias en una economía, las estructuras “democráticas” son un indicador de las condiciones de vida medias de esos hogares. Si se analizan las diferencias entre ambos, se obtiene una aproximación a la distribución del bienestar. Cuando ambos indicadores difieren mucho, es porque los hogares más ricos pueden gastar mucho más que los hogares más pobres, de manera que su peso relativo cambia significativamente según se sumen los gastos o se promedien los porcentajes de gasto que cada hogar destina a satisfacer diferentes necesidades. Al ser indicadores diferentes, los usos que se les pueden dar son, obviamente, distintos. Por lo tanto la forma en que se calculen las estructuras depende del uso que se les quiera dar.

    El IPC es un indicador de la evolución general de los precios, que se utiliza como insumo para las Cuentas Nacionales y como indicador para realizar, entre otras, políticas monetarias (por ejemplo, para decidir cuántos billetes y monedas deben ponerse en circulación para satisfacer las necesidades de efectivo de la economía). Como indicador macroeconómico, debe tener en cuenta las magnitudes agregadas, que dan cuenta del comportamiento de la economía en su conjunto. Es por esa razón, entre otras de orden técnico, que los IPC se calculan, no sólo en Argentina, en base a ponderaciones que surgen de estructuras de gasto “plutocráticas” y esto no significa en absoluto que no se tenga en cuenta lo que ocurre con los hogares más pobres, ya que la situación relativa de los distintos grupos de hogares puede evaluarse, también, a partir de estos índices, como explica un documento de la comisión técnica de ATE-INDEC. Pero no debe olvidarse que el objetivo fundamental del IPC sigue siendo dar cuenta de la evolución de la inflación, y no de las condiciones de vida de la población.

    Reemplazar un IPC “plutocrático” por otro “democrático”, no equivale a democratizar el acceso al bienestar, sino a perder un indicador macroeconómico fundamental para el diseño de políticas económicas y sociales, que son las herramientas de las que disponen los gobiernos para incidir en la distribución del ingreso y las posibilidades de consumo de todos los hogares. Pero además, y como dijimos en varias oportunidades, la disponibilidad de más indicadores es bienvenida, mientras esto no implique la pérdida de los indicadores previamente existentes, y mucho menos la destrucción lisa y llana de la credibilidad institucional. Cierra el post los gráficos de estructura de gasto de los hogares elaborados en base a la Encuesta Nacional de Gasto de los Hogares de los años 1996/1997.

    Gráfico: Estructuras de gastos de los hogares (Click para agrandar)

    16 comentarios:

    Unknown dijo...

    O sea, el gobierno mas plutocrático de la historia es el de los inefables kk. Felicitaciones!

    @PaloMedrano dijo...

    Aplausos. Clarísimo.

    Federico dijo...

    perfecto artemio. Que hacemos ahora con los tipos que creian que Kirchner era el Jefe del Frente de Liberaciçon Nacional y los que, en consecuencia creian que el napia era la versiçon buena del jefe de policia. anda a explicarles ahora que defender a moreno no es defednder la causa.

    Alfredo Luis Fernández dijo...

    Es más consistente el Artemio serio que el zumbón. Muy buena la nota, muy buena la observación respecto a que son bienvenidos los métodos nuevos mientras no destruyamos los viejos y la credibilidad general del sistema.
    Moreno, a recuperar empresas de prepo, y fuera de todo lo demás.

    guille dijo...

    jajajajaja ,tas como loco.plutocrata.Pppppppppp

    nene de pecho dijo...

    Maquiavélico, aunque muy ilustrativo y hasta elegante.
    Ahora, si la guita no aparece?
    Qué sigue?. Se van repartir banderitas?. Pregunto.

    pd: A mí, hace rato que dejaron de gustarme las alpargatas.

    salu2

    Unknown dijo...

    Por qué no un solo relevamiento y distintos conjuntos de ponderadores (con ceros incluidos)?

    Varios IPC (IPC1, IPC2, IPC3..... ), de confección transparente. Uno plutocrático, otro democrático, otro mediopelo. Y reglas que adjudiquen áreas de aplicabilidad: para discusiones salariales tal, para los bonos aquel, para haberes de los pasivos el otro, .....

    Cada uno TRANSPARENTE, estimando lo que se pretende y PARA lo que se pretende.

    Las denominaciones tienen su ideología .... Así IPC Plutocrático e IPC Democrático contrabandean atributos ... Se podría hablar de IPC Global (cuasi, porque siempre deja afuera extremos de consumidores y consumos) e IPC Popular ¿Cómo suena? Popular no le escatima toda la aureola de Democrático y Global no estigmatiza como Plutocrático .... Eso sí, TRANSPARENTES!!

    http://books.google.com.ar/books?id=ksymqNhM7v0C&dq=plutocratic+bias&printsec=frontcover&source=bl&ots=KJZLTtqKLg&sig=QvWVXXzb5quYfPBjlHtnRqxLib0&hl=es&ei=OQJmSuDtBp_FmQeCgfGrDw&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=10

    En la página 3 se define el sesgo plutocrático como la DIFERENCIA (resta) entre el IPC plutocrático y el IPC democrático. No se debe corregir el IPC plutocrático para eliminar el mentado sesgo. Tal sesgo (bias) está definido presumiendo los 2 IPC's . El sesgo valdría cero solo en el caso de total homogeneidad de los consumidores ...

    Artemio López dijo...

    Míster comparto, deben convivir varios IPC, todos transparentes. un sistema puede envejecer, y debe cambiarse , pero si se cambia , se lo hace luego de una laaaaaarga etapa de convivencia con el viejo a reemplazar.
    salu2!

    Vincent Vega dijo...

    Muy bien explicado, Artemio. Sin saber nada del asunto, igual creo que los modelos usados por el Estado en su trabajo debieran estar sujetos a escrutinio público, y en eso las universidades públicas debieran tener un rol preponderante.

    Horacio Gris dijo...

    Muy claro.

    saludos

    oti dijo...

    Artemio, qué pasaba si se aplicaba la estructura democrática en 2002?, la variación del primer semestre de ese año en lugar de dar 40% hubiera dado 90 o 100%? Creo recordar que un grupo de alimentos básicos había aumentado muchísimo más que el promedio del IPC de aquel año.

    ¿Cuál hubiera sido la variación, por ej., en marzo o abril de 2002, con la estructura democrática?

    Unknown dijo...

    Querido Artemio:
    Que o quien nos determina que la medición del nuevo IPC es 1/3 del histórico. Con que parámetros medimos hoy, nosotros tristes mortales, el índice de precios. Que muestra es lo suficientemente representativa como para asegurar, sin incurrir en falsedad metodológica, que el número que da X no es el correcto y sí lo es el que me da Y, aún a sabiendas de que Y no tiene forma de justificar su guarismo con 1/10 del universo tomado por X.
    Feo me parece dar por sentado datos sacados de la nada o por lo menos tan dignos de ser desconfiados como los oficiales.

    Unknown dijo...

    Gracias Artemio, pero Ud. dice “si se cambia , se lo hace luego de una laaaaaarga etapa de convivencia con el viejo a reemplazar”. Disiento con lo de laaaaaarga etapa. Ese camino habilita laaaaaargas y burocráticas postergaciones de TODO. Por ejemplo, la reducción de la pobreza para guardar proporcionalidad, debería llevar 50 ‘aes’ en lugar de sus 6, y comenzar en 10 años. Con decir una experimentación “EN SERIO” tendría que ser suficiente (y puede ser hacia atrás, con los datos ya levantados). Lo laaaaaargo habilita que Ernesto Rosa (Universidad Tres de Febrero, http://www.ieco.clarin.com/notas/2009/07/24/01964923.html) reclame MAS DE UN AÑO para el informe académico sobre el IPC-Edwin-Paglieri-Itzcovich!!!!!

    Hay quer trabajar con varios IPCs (usted declara acuerdo), y reglamentar para que se utilizará cada uno.

    En cuanto a las dificultades de la “desmorenización” no producida ¿cómo se lo imagina usted? Porque se trata de un problema concreto ¿traen a Bevacqua?

    Mariano T. dijo...

    Muy claro. Y más claro me queda que esta diferencia no explica las colosales diferencias entre el IPC oficial y la unanimidad del resto (incluyendo provinciales y privados, además de mi tía Maruca).
    Por lo tanto es sarasasasa y cortina de humo para tapar la triste realidad: Truchan los datos, donde hay que poner 7,5 ponen 4,2, "bajame la zanahoria", "sacame el zapallito que subió", "ese hotel esta caro andá a medír uno más berreta""Tomá la prepaga más barata y si sube pasate a otra"
    Sarasasasa y cortina de humo

    Unknown dijo...

    La verdad, tenés razón. Lo dicen en todos lados. El INDEC miente, el gobierno nos toma el pelo, Moreno nos extorsiona. Lo dicen licenciados, tacheros, doctores, amas de casa, periodistas especializados, MIrtha Legrand, el sodero, ex ministros de economía, la mismísima profesora Bevacqua. Todos indefectiblemente utilizan la fórmula aprendida en los estrados de Harvard que enuncia: “Vos viste como subió todo?, fuiste al súper últimamente?”
    Para todos aquellos que entiendan como verdad irrefutable lo que los medios de des-información nos enuncian, va esta sencilla apostilla.
    En una nota de Pagina 12 del 01/08/09, Alfredo Zaiat cita, hablando de otro tema, una consultora refuta la intangibilidad de todos los argumentos expuestos anteriormente y nos demuestra, casi sin querer, que poco sabemos de estadística todos aquellos más o menos leídos en otros menesteres de la cultura, pero que poco tenemos que ver con los tecnicismos específicos de esta materia. Dice Zaiat en un párrafo de su nota: “En un reciente informe del Estudio Bein & Asoc. se destaca que para eliminar los subsidios al transporte urbano de pasajeros, calculado en 4884 millones de pesos en el primer semestre de este año (83,8 por ciento más que el destinado en el mismo período de 2008), las tarifas deberían aumentar 116 por ciento en el caso de los colectivos y 419 por ciento en los ferrocarriles y subtes. Los economistas de esa consultora estiman que de ese modo el boleto promedio de colectivo debería costar 3,05 pesos, el de subte, 5,71, y el de tren, 6,18 pesos. Hoy, el valor promedio de esos medios de transporte se ubica en 1,41, 1,10 y 1,19 peso, respectivamente. La conclusión de Bein es que “más allá de la no viabilidad política de semejante aumento, el impacto en el IPC de sincerar plenamente estas tarifas alcanza a sólo 4 puntos porcentuales”, para agregar con destinatario misterioso que “vale la pena remarcarlo porque no parece intuitivo”.”


    Ahora bien, esto no lo escribe ni Norberto Itzcovich, ni Ana María Edwin, ni nadie vinculado con el mal encaramado en los subsuelos del INDEC, esto lo escribe un estudio privado de consulta cotidiana en varios medios y como dijera anteriormente, no es el centro de la nota, pero nos muestra cómo un ítem tan sensible a la cotidianeidad de todos nosotros, tan propicio para exclamar ¡!qué barbaridad!¡, tiene una incidencia ínfima respecto de la sensación e indignación que nos produce.
    Quedó claro?
    Buenas tardes

    edludd dijo...

    nuevamente: existe un breve pero interesante artículo que explica en qué consiste el sesgo plutocrático, y está publicado en la página de la Asociación Argentina de Economía Política. Es del año 2000, con lo cuál está relativamente apartado de todo este debate por el INDEC, en el que entran a jugar otros factores.
    Acá el texto: http://www.aaep.org.ar/anales/works/works2000/lodola_busso_cerimedo.pdf