9/28/2007

balance de viernes

Como se observa en el gráfico que abre este post (click sobre la imagen para verlo mejor), con la tercera tiranía en pleno desarrollo, apenas el 14,7% de los asalariados trabajaba en negro y la pobreza por ingresos alcanzaba al 6% de la población. Por suerte eso cambió y con la dictadura desembarcaron nuestros republicanos liberales que a sangre y fuego impusieron el sistema económico social libérrimo que maduró en los años noventa. En medio de la gloriosa década de liberalismo falopa, el crecimiento crítico del trabajo informal resultó de 1 punto por año promedio . Tras la mega crisis del modelo neoliberal, y ya con la irrupción en escena del estratega de Lomas de Zamora, Presidente del Movimiento Productivista Argentino e Intrépido Cazador de Escualos de Gran Porte , tras implementarse la mega devaluación, la intensidad de informalización del mercado de trabajo acumuló entre 10 y 12 puntos de informalidad adicionales tan sólo en el período 2001-2003, una intensidad de informalización laboral post devaluatoria un 500% superior a la media de mega informalización de los años noventa. Finalmente en el período de gestión de Pierre, la performance de descenso del trabajo informal es firme como tendencia pero de magnitud y ritmo discretos. En efecto luego del pico de 49,2% en el último semestre de 2003, la serie de trabajo informal comienza a marcar una tendencia decreciente sostenida , pero de lento desarrollo, hasta llegar a su valor mínimo en el primer semestre de 2007, donde alcanza el 40,4%, en línea con los ya muy elevados niveles de informalidad previos a la salida de la convertibilidad. Tras la salida en 2002 de la recesión iniciada en 1997 , la permanencia de niveles de informalidad tan altos a pesar del crecimiento económico (por cada punto de crecimiento la informalidad sólo cayó 0,25) resulta un tema crucial a la hora de comprender porqué hoy, a menos de cuatro puntos del pleno empleo, se observan aún niveles de pobreza del 25% que parecen ya inelásticos al crecimiento económico y a la caída del nivel de desempleo. Sucede que en condiciones de informalidad, un asalariado hoy registra un sueldo promedio de $545 mensuales, equivalente apenas al valor de la línea de indigencia para un hogar tipo de cuatro miembros. Se trata del denominado "working poor" o trabajador pobre, esto es ocupados plenos, informales en su absoluta mayoría, que a pesar de ser ocupados, registran un ingreso por debajo del nivel de pobreza. En esas condiciones convive en el país al menos un 30% de los asalariados (sin contar a los cuenta propia), por lo cual, manteniendo la actual pauta distributiva y la morfología del mercado de trabajo con niveles de informalidad superiores al 35%, la pobreza no descenderá de un piso mínimo estimable en un 20% de la población total. Esta circunstancia de tanta carencia supondrá que Argentina será, ya con pleno empleo en el año 2009, un país donde el 30% de los menores de 15 años permanecerá en situación de pobreza y de ellos un 12% de los niños en indigencia por ingresos, estos es conviviendo en hogares que no garantizarán su seguridad alimentaria.

31 comentarios:

El Isáurico dijo...

Don Artemio:
Pero como puede ser?.
De vuelta los datos fríos pintan que la situación estaba mejor en los 90 que ahora?
Diga que Ud. tomó los datos del INDEC, con lo que tranquilamente podemos pensar que hay un error estadístico...porque si los 90 fueron el infierno no hay otra manera de entender que los números muestren que en el purgatorio estamos peor (en esa tónica y a este paso, cuando logremos entrar al cielo vamos a estar todos haciendo changas).
Pero bueh...hoy me pegó en melanco-pesimista; como gallina entiendo que ponemos huevos, pero me tiene a mal trae que la gran Radamel solo sirva para prolongar la agonía a las que nos somete el dúo dinámico: Aguilar-Pasarella (¿tengo que aclarar cual esel que se viste de Robin?).
Saludo cordial,
P.S.: por si todavía no la escuchó, préstele un ratola oreja a Amy Winehouse (al nivel de Janis; lamentablemente es probable que reviente mas joven todavía)

Artemio López dijo...

peter, no le reconozco nada deportivamente, pero si musicalmente y escucharé.. y ojala la niña siga más que la Joplin.
salu2

Anónimo dijo...

Será por lo que dice Peter que a Menem lo votaban tanto?

Artemio López dijo...

no se no se, ahi están los números, opiniones abstenerse :P
salu2!

Mensajero dijo...

datos fríos muestran un crecimiento de 15 puntos noventistas contra un descenso de 9 setentistas (10 años contra cuatro).
Siguiendo la tendencia harían falta otros ocho años de monarquía para volver al nivel del 89. y no se cuántos más para volver al 74.
¿Que tal viene kirchner junior?

Anónimo dijo...

baja el empleo en negro y hay ciertas empresas que suben las ganancias como es "Devido", todos contentos.. vermouth con papas fritas y good show

oti dijo...

Creo que contando el sector privado solo el trabajo informal es 47%.

Anónimo dijo...

La trepada desde el 89 al 99 es bastante impresionante.

Primo Louis dijo...

Será que comotoda respuesta dirán que ese es el punto de equilibrio?

Anónimo dijo...

me gustaría un mundo con menos "escribas" y con más plata para las escuelas

Anónimo dijo...

Con convertibilidad hoy estaríamos mucho mejor



La crisis energética es consecuencia de la violación por el Estado de todos los contratos de concesión y de las reglas de juego de mercado que significó el congelamiento de las tarifas en pesos a los niveles anteriores a la devaluación. Si se hubiera mantenido la convertibilidad, las empresas habrían seguido invirtiendo y hoy no habría crisis energética.


La inflación ha reaparecido en la economía Argentina porque la devaluación permitió que los precios de los bienes competitivos con importaciones y la mayoría de los bienes de exportación se multiplicaran por 3, mientras se pretende evitar que los salarios y los bienes y servicios no ligados al comercio exterior aumenten en la misma proporción. Como esta pretendida redistribución regresiva del ingreso, además de injusta, es una situación de desequilibrio, todos los precios y salarios que aún no se multiplicaron por 3 seguirán aumentando hasta deshacer el efecto de la devaluación. Y si el gobierno insiste con la política de tipo de cambio real alto y vuelve a devaluar, la inflación se espiralizará y se transformará en una enfermedad crónica de la economía, como lo fue entre 1950 y 1990. Nada de esto habría ocurrido si no se hubiera abandonado la convertibilidad.


Hay desabastecimiento de muchos bienes, porque el gobierno quiere evitar el aumento de los precios con controles que violan las leyes más elementales del mercado. Nada de esto hubiera ocurrido con convertibilidad.


Los problemas del transporte urbano y del tráfico aéreo, también son la consecuencia de las distorsiones entre precios y costos que creó la devaluación. La situación sería totalmente diferente si continuara la convertibilidad.


Sin devaluación no hubiese habido Corralón, y el Corralito podría haberse levantado sin problemas en 90 días, luego de concluida la reestructuración de la Deuda, que, en diciembre de 2001, ya se había logrado en más de un 50 %.


Y, por si todo esto fuera poco, con convertibilidad podríamos haber acumulado el mismo crecimiento del empleo y de la producción, con mucho mejores perspectivas se sostenimiento en el tiempo, porque no existirían los cuellos de botella que hoy amenazan con frenar la expansión económica.


Quienes descreen de esta interpretación de nuestra historia reciente, no advierten que el crecimiento de los últimos cuatro años es simplemente el rebote de la fuerte caída anterior y a la bonanza internacional que se produjo a partir de la devaluación del… Dólar frente al Euro y las demás monedas. Era esta devaluación, y no la del Peso frente al Dólar la que se necesitaba para sacar al país de la depresión en que había entrado desde 1999.


Y la necesaria devaluación del Dólar frente a prácticamente todas las monedas importantes del mundo se produjo a partir de mediados de 2002. Como no podía ser de otra forma, vino acompañada de una fuerte recuperación de los precios de nuestros productos de exportación…en dólares!. Por lo tanto, aún sin devaluación del Peso frente al Dólar, los problemas de competitividad de Argentina se habrían resuelto de manera genuina, sin provocar injustas redistribuciones de ingresos y riqueza y sin crear los desequilibrios que hoy amenazan con generar estancamiento y aceleración inflacionaria.


Y si a lo largo de 2002, luego de reestructurada ordenadamente la deuda pública externa, hubiese quedado demostrado que el Peso seguía sobrevaluado, habría bastado moverse hacia una convertibilidad flotante, acompañada por una política monetaria de metas de inflación, como la que vienen aplicando Chile, México, Perú y Brasil, que de ninguna manera hubiera significado una devaluación del Peso mayor al 20 %.


Hasta que un gobierno no advierta que ésta es la lectura correcta de nuestra historia reciente, no se encontrarán soluciones ni a la crisis energética, ni a la crisis de los transportes, ni al desabastecimiento y, mucho menos, a la inflación.


Alguien tiene que animarse a decirle esto a Kirchner.


Espero no ser el único, porque lamentablemente, la estrategia de los que hoy aconsejan al Presidente es descalificarme en lugar de prestarme la atención que me brindaban cuando necesitaban de mi ayuda para ganar elecciones.


No estoy totalmente desesperanzado porque en Enero de 2002, cuando Duhalde producía la zafarranchosa salida de la convertibilidad, Kirchner todavía tenía buena intuición económica. Yo creo que perdió esa buena intuición cuando comenzó a re-estudiar economía con Lavagna como maestro…Bueno sería que así como se lo sacó a Lavagna de encima, se deshaga cuanto antes de los ideólogos del “Modelo Productivo” Duhaldista, que aún tienen monopolizado su oído.


Y, hablando de Duhalde, es sorprendente no encontrar en su reciente libro una línea sobre la cantidad de leña que él le puso al incendio cuando endeudó a su provincia de manera alevosa entre 1997 y 1999. Tampoco reflexiona sobre la leña que aportó a los incendios que ahora han comenzado a aparecer en la gestión de Kirchner. Se trata de un incendiario que cree que mientras haya incendios, puede ofrecer impunemente sus servicios de bombero.


¿¿¿ENTIENDEN "JUNTA-FIRMAS"???

Andrés el Viejo dijo...

Tres hipótesis sobre el que firma Domingo Cavallo:
1) Es realmente Cavallo. En ese caso, es muy natural que defienda sus fechorías con el rostro pétreo que le conocemos desde 1982.
2) Es un fino humorista que imita a la perfección contenido y estilo del sujeto parodiado.
3) No es Domingo Cavallo, sino un impostor convencido de las cosas que escribe. ¿Alguien le limpia la baba, por favor?
Saludos

Anónimo dijo...

A este ritmo, la economía argentina entrará en recesión o por lo menos se estancará en el verano. Hay factores externos e internos que me llevan a pensar de esta forma: a) la crisis hipotecaria norteamericana y europea y b) un conjunto de usinas internas de riesgo tales como: el desborde del gasto público nacional, la incertidumbre pre-electoral, el manoseo institucional del INDEC y la crisis energética, en este orden de importancia. En virtud de estos factores, la prima de riesgo-argentino exhibe desde el mes pasado una suba interanual por primera vez desde el año 2002. Esto es veneno para la economía. Tendrá rápidas consecuencias sobre la actividad económica. Las inversiones se postergan, el poco capital que entraba ahora sale.

Hasta marzo, el país vivirá una etapa insegura. El rumbo posterior dependerá de las decisiones que tomen en el ínterin la Reserva Federal de EEUU y el futuro presidente argentino.

Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal, se muestra reacio a bajar la tasa de interés relevante (la de los fondos federales). Teme consecuencias negativas en materia de inflación y de riesgo moral. La inflación core ya se ubica por debajo del 2% anual, que es el techo fijado por la misma Reserva Federal, pero la inflación a secas todavía está por arriba de ese techo. Tampoco Bernanke querría dar a los inversores la impresión de que se asusta fácilmente y termina por subsidiarles los riesgos que tomaron en sus especulaciones. No obstante estas consideraciones, lo cierto es que la Reserva Federal aumentó la oferta monetaria nada menos que un 16% entre el 9 de agosto y el 11 de septiembre; que la inmensa mayoría de los bancos de EEUU espera entre dos y tres rebajas de 25 puntos básicos, las cuales dejarían a la tasa de interés entre 4.75% y 5% anual a fines de diciembre, y que la tasa de crecimiento del PBI de EEUU se ha reducido significativamente este año a un mero 2%.

Creo que el pronóstico de los bancos es acertado y que la rebaja de la tasa de interés americana le pondrá un piso a la crisis bancaria y financiera mundial antes de fin de año.

En el plano interno, con el paso de las semanas me he ido formando las siguientes impresiones: a) La Sra. de Kirchner ganará las elecciones. b) El gobierno, aun antes de que ella asuma, frenará considerablemente la expansión del gasto público. De hecho, ella declaró días atrás que en 2008 el superávit se elevaría a 3.15% del PBI (desde el 2.5% con el que cerrará este año) y Ambito Financiero informó ayer que el gasto aumentaría apenas 15% en 2008 (en la actualidad aumenta a un ritmo de 50% anual). En tal caso, el superávit bien podría elevarse a 4% del PBI a fines de 2008. c) El BCRA seguirá devaluando el peso. La devaluación, y la inflación consecuente, ha regresado como herramienta activa de las finanzas públicas argentinas. El ajuste fiscal se concretará en parte por medio de la devaluación, que aumenta la recaudación de retenciones a la exportación, y la inflación, que aumenta la base imponible de los restantes gravámenes. d) El gobierno no caerá en default en 2008. Mediante el freno del gasto público y la devaluación, más atrasos en los pagos y alguna refinanciación forzada de vencimientos de la deuda, el gobierno podrá evitar el zafarrancho de una cesación de pagos. e) El gobierno permitirá que las empresas privatizadas actualicen sin prisa las tarifas de los servicios públicos. f) El gobierno arreglará el default con el Club de París. Está necesitado de que el mundo le refinancie los vencimientos de capital de la deuda reestructurada en 2005. Sin dar este paso no habrá refinanciación externa. g) El gobierno normalizará la situación del INDEC, a fin de evitar que nos declaren un default técnico sobre los bonos que ajustan capital por CER (que es el Indice de Precios al Consumidor que cada mes "revisa" el Sr. Moreno.)

De estos 7 pronósticos en el plano interno, los cuatro primeros son los más probables. Los restantes son menos probables pues la Sra. de Kirchner podría resultar un Presidente tan caprichoso y recalcitrante como el marido.

Si las cosas evolucionaran como creo, en marzo la prima de riesgo-argentino podría ubicarse en un nivel bastante menor que el presente, el crédito podría recuperarse y la economía argentina podría volver a crecer a buen ritmo. Corremos algunos riesgos, desde luego. Uno de ellos es que el precio de las commodities de exportación caiga fuertemente; los pronósticos que leo dicen que ésto no ocurrirá. Otro es que la aceleración de la inflación fogonee la puja distributiva y el conflicto social. Mi respuesta aquí es que el gobierno, la UIA y la CGT son socios en la explotación de la inflación; son incapaces de concebir una Argentina sin una buena dosis de inflación. El primero la necesita para financiar sus gastos. La segunda, para ganar rentas sin invertir. La tercera, para conseguir aumentos que la justifiquen ante los asalariados y la sociedad. Por eso creo que la inflación es más una materia de acuerdo que de conflicto social.


DEBATAN MEDIOCRES, DEBATAN!!!

Anónimo dijo...

Se necesita una buena dosis de mediocridad para dedicarse a copiar y pegar opiniones ajenas, ¿no?

Anónimo dijo...

Por el kirchnerismo, hoy, sólo apuestan los encuestadores. Ellos son los que se ubican a la vanguardia de la campaña. Y el próximo domingo tratarán de quitar, definitivamente, a todos los opositores del escenario. Con la mera divulgación extorsiva de sus números. Los que garantizan que la señora gana, con placidez, en la primera vuelta. Porque obtiene, consagratoriamente, entre el 47 y el 44 por ciento.
Sin embargo, los números de los encuestadores, encolumnados detrás del inagorable presupuesto del oficialismo, son como los índices increíbles del imaginario del Indec. Pero a la inversa.
Contrastan con los números que aporta, caprichosamente, la realidad. O con los valores rigurosos de la Consultora Oximoron. Que indica, en informe próximo a publicarse, que la señora Cristina marca algo más del 32. Y algo menos, eso sí, del 34. Y que viene, asombrosamente, en picada. Desde antes, inclusive, que necesariamente deba clarificarse si la señora Cristina obtuvo, su ponderado título académico, en la misma universidad de Blumberg. Y de Telerman.
Por lo tanto, para los sudorosos profesionales del Frente Encuestológico de la Victoria, y apenas para constar en actas, sólo resta oficialmente saber quien saldrá segundo. Y nunca, a menos de treinta puntos abajo. Si el honroso subcampeonato se queda para la mutante combinación de la señora Carrió. O para el combo de la esfinge meritoria de Lavagna.
Al estragado López Murphy, en cambio, por sus escoriaciones, ya se lo aparta del pelotón de segundones especiales. De tres opositores reconocidos se pasa, entonces, a dos. Y casi lo amontonan, numéricamente, a López Murphy, con los otros dos postulantes que vienen algo más rezagados. Y que, curiosamente, son los que pueden ofrecer una cierta garantía de gobernabilidad. Me refiero al menemismo tardío de Rodríguez Saa, que Rocamora bautizó como Turismo Aventura. O al combo que integro, y que encabeza Sobisch.
A ambos exponentes del “potrerismo” los emparejan, en materia de cifras, con las distintas ofertas de las vertientes unipersonales de la izquierda. Las que llevan, como mascarones, a Solanas. O a la señora Walsh.

¡Sáquenlos!
Por último, el optimismo oficialista contrasta con los datos que brinda la otra realidad. Lo cual me permite inferir que de ningún modo nos encontramos ante un problema político. El problema es de base, de raigambre cultural. Porque, por donde andemos con Sobisch, ya sea por Paraná o en Santa Fe, o ni hablar por los costados de la capital, la gente que naturalmente se nos acerca es casi para suplicarnos
“¡sáquenlos!”.
Por favor sáquenlos, nos dicen. O nos suelen reprochar, con cierta unanimidad, la tradicional “falta de unión de los opositores”. Como si la fragmentación fuera una expresión de la voluntad. En fin, es lo previsible. Códigos de interpretación que supo imponer el Frente Analítico de la Victoria. El que prefiere atribuir, para expurgarse, el plausible triunfo de Cristina, a la impotencia de la oposición que no se supo unificar.

Implosión
Oberdán Rocamora.- Perfecto, Jefe. Como diría Neruda: “Claro como una lámpara. Simple como un anillo”. Es otra constatación que certifica su cuento sobre la “conciencia colectivamente social de la debacle”. La que enuncia el acertijo, o el crucigrama tétrico. Sobre si esto, o sea el kirchnerismo, explota, por implosión, en el 2008. O en el 2009.
O del otro cuento que le escuché, entre las innumerables emisiones de los canales de cable. Con Clara Mariño, con el Kikuchi, con Carnota, la señora Cánepa o la Karina Alonso Piñeyro. Lista interminable de su periplo. Me refiero a la fábula suya que apunta a “la resignación atávica de la sociedad, a ser presidida por una señora a la que, mayormente, detesta”. Le salió redondito.
O al otro cuento que usted mantiene, a mi criterio, aún más armado. Y que, en cierto modo, comparto. Basado en el informe, aún no conocido, de Oximoron.
El informe indica que, así Cristina no gane en la primera vuelta, puede imponerse, con mayor facilidad, en la segunda.
Sobre todo si al eventual balotage, la señora Cristina, como la llama usted, debe toparse con las pintorescas mutaciones de la señora Carrió. La cual no acierta, la pobre, a proporcionar una garantía de equilibrio y credibilidad. Aunque lo muestre a Pratt Gay, para oxigenarse en la materia de la previsibilidad. O se ponga, de pronto, a reivindicar la moral de los militares.
O el otro cuadro. Que la señora Cristina deba toparse, en segunda vuelta, con la esfinge de Lavagna. Que viene como un presentable estandarte del gastado “combo alfonsinista”. Combinación que simultáneamente lo legitima y lo acota. El alfonsinismo no tiene, según la circularidad de su cuento, “una tercera oportunidad sobre la tierra”.
También percibo que, por la concatenación de laceraciones ocasionadas a López Murphy, el kirchnerismo se lo carga, de rebote, a Macri.
A propósito, Macri ya debe esforzarse, igual que Lusito Barrionuevo, para no parecer un Joven K.

Entonces acuerdo que se lo ubica, a López Murphy, más cerca del pelotón de ustedes. Con Sobisch, con Solanas, y el Turismo Aventura de Rodríguez Saa. Y más lejos de los otros dos opositores reconocidos, como Lavagna y Carrió, ya oportunamente, en su relato, descalificados.
Por lo tanto, asistimos a la consagración de la “resignación atávica” que usted, en principio, condena. Aunque me va a aclarar, porque lo conozco de memoria, que de ningún modo usted condena la resignación. Que sólo la enuncia. O la describe. Pero permítame decirle, Jefe, que en este juego usted no entra como analista. Entra como candidato.

Y??? PESEBREROS!!!

manolo dijo...

Lo que plantea ¿Jorge Avila? es una de las variables mas probables del Team Peirano.
Pero hay un problema, la tesis el Estratega de San Martín.
Discutir los aumentos en base a la Productividad, ¡Luisito quiere hablar de Plusvalía!.
Si a esto le sumamos los conflictos que se producirán en Chile por la brecha social, vamos a tener un verano movido y un otoño calentito en el Cono Sur.

Artemio López dijo...

oti, es así solo el sector privado analizado, implica mayor informalidad.

salu2!

Anónimo dijo...

El problema de Jorge Avila es que pega y no lee, por ejemplo pone como un factor de crisis en el verano (repito, en el verano) a la incertidumbre electoral...
que incertidumbre electoral puede haber en enero???

El Astronomo.

Anónimo dijo...

Menos mal que jorge avila nos tranquiliza!!

Zain:
En vez de postear a Asis porque no te mandás una opinión propia?

Anónimo dijo...

Lamentablemente, pese a que su influencia inicial fue atenuada, los ideólogos del Modelo “Productivo” lograron imponer su interpretación de la historia económica de la Argentina y han logrado que muchos dirigentes políticos y analistas mediáticos, la utilicen para interpretar la realidad económica de la Argentina actual.

Como ejemplo de esta interpretación equivocada de la historia merecen mencionarse:

a) el olvido de la inflación, la stagflación y la hiperinflación, como enfermedades endémicas de la economía Argentina durante cuatro décadas;

b) la desestimación de los impuestos distorsivos como factores que encarecen y desalientan las inversiones, la producción y el empleo en los sectores más productivos de la economía;

d) la ponderación de la sustitución de importaciones como estrategia de crecimiento y la desestimación de la apertura de la economía como promotora de eficiencia económica y de competitividad externa.

e) la identificación de la Convertibilidad con el “atraso cambiario” ocasionado por la tablita de Martínez de Hoz como responsables del estancamiento de la economía Argentina durante las últimas décadas, omitiendo deliberadamente cualquier mención a los atrasos cambiarios del Ministro Gelbard entre el 73 y el 75 y del Ministro Sourrouille entre 1985 y 1987, gestiones ambas que lo tuvieron a Lavagna como miembro de los respectivos equipos económicos;


Néstor Kirchner fue, lamentablemente, uno de los dirigentes convencidos por los ideólogos del Modelo “Productivo. Este hecho demuestra su habilidad persuasiva, porque me consta que Kirchner antes era conciente de la importancia de erradicar la inflación y estuvo en contra del abandono de la Convertibilidad en 2002, que entendía muy bien que los déficits y no la Convertibilidad eran los responsables del endeudamiento público, a punto tal que durante los 90 nunca endeudó su provincia. En aquel entonces estuvo de acuerdo con la eliminación de los impuestos distorsivos y siempre reclamó la coparticipación automática de todos los impuestos recaudados por la Nación. Además nunca adhirió a los reclamos proteccionistas de los industriales ineficientes y siempre se opuso a los gravámenes que desalientan la exportación desde las economías regionales.

A pesar de haber tenido estas actitudes claras en el pasado, Kirchner sucumbió a los poderes persuasivos de los ideólogos del Modelo “Productivo”

Cabe preguntarse dónde radicó la clave de este éxito persuasivo. La clave estuvo en la combinación de varias circunstancias que favorecieron la difusión de sus ideas:

a) la conveniencia para muchos empresarios, muy influyentes en los medios de comunicación, de esta interpretación de la historia, como forma de cargar la solución de sus problemas de endeudamiento a costa de ahorristas, trabajadores y jubilados, sobre las espaldas políticas de los gobiernos anteriores;

b) la desvalorización del Dólar a escala global (de más del 40 % frente al Euro, por ejemplo), el impresionante aumento de los precios internacionales de nuestros principales productos de exportación y la abundante liquidez internacional que produjo una bonanza mundial nunca antes vista;

c) la existencia de una moderna estructura productiva en el sector agropecuario, la minería y los sectores industriales que habían logrado re-equiparse y modernizarse durante la década de los 90; esta circunstancia permitió aprovechar rápidamente la mejora en los términos del intercambio externo.

d) la modernización de la infraestructura y el excelente grado de capitalización que tenían los sectores de la energía y otros servicios públicos en el momento en que se lanzó el Modelo Productivo; esta circunstancia permitió esconder hasta hoy el proceso de descapitalización y deterioro en que entraron esos sectores desde 2002;


Los ideólogos del Modelo “Productivo” tuvieron una habilidad destacable en atribuir todos los costos de las nuevas medidas al Modelo de la Convertibilidad y de apropiarse de todos los beneficios de las circunstancias internas y externas que posibilitaron una rápida recuperación de la economía y cuatro años sucesivos de crecimiento a ritmo asiático.

Ahora están tan engolosinados con este éxito propagandístico que se han lanzado a convencer a los argentinos que los costos que aún no han sido advertidos por la sociedad, pero que pronto se pondrán de manifiesto con elocuencia, no son responsabilidad del Modelo “Productivo” que ellos pregonan, sino de los errores cometidos por los ejecutores pragmáticos desde la salida de Lavagna del gobierno de Kirchner.

En esta nueva campaña propagandística, esperan tener la complicidad resignada de los derrotados ideólogos liberales, que, por odio a Kirchner, estarán dispuestos a adherir no sólo a las críticas de los ideólogos del Modelo Productivo, sino a su interpretación de la historia, aunque ésta los condene al papel de ingenuos divulgadores del “Consenso de Washington”.

DEDICADO A LOS MEDIOCRES DE SIEMPRE!!!

Anónimo dijo...

Cavallo:
Como siempre, las condiciones externas favorables al país aparecen después que ustedes se fueron, !!siempre con esa mala suerte!!

Anónimo dijo...

Lo lamento señores, pero estos mensajes tan extensos no los leo: sería un despropósito leer los papiros kilométricos de gente que, en lugar de crear un blog propio y explayarse a gusto ahí, intrusa los ajenos y nos fatiga, encima, con opiniones y comentarios que ni siquiera son propios (cortado y pegado mediante).
Laura

Anónimo dijo...

¿Oberdán Asís sigue vivo después del quemo con Sobísch? Despojos calcinados, cenizas que el viento se llevó: ¡Mirá que hay que estar borracho o drogado para citarlo!

Anónimo dijo...

fosforito:

¿¿¿no hay algún taller literario en la matanza???

anotate, te va a venir bien... comprate el "upa" y un libro de paulo coelho...

saludos,

supradyn

Anónimo dijo...

Tenés razón fosforito!!: qué Turco vende beinetas, jabón jaboneta!!
Bajame la jaula cayetano, bá-ja-me-lá...

Anónimo dijo...

Me anoto donde vos quieras, supradyn, pero con una condición: que vos dejes el tinto y la falopa, como hizo Asís cuando lo llamó Sobísch. O no lo sabías?
No viste que ahora el Turco está que revienta los trajes? Por qué te parece que es? Por el ocio? Por su avanzada edad?

Anónimo dijo...

fosforito:

trato hecho!!!

pero con respecto a asís, no se olvide que es un artista, y los artistas a veces necesitan de vicios para explotar su genio... sepa disculparlo...

un gusto,

supradyn

Anónimo dijo...

A mí también me llegaron noticias del tema de asís y la falopa (lo del tinto no lo sabía). Me enteré de que la dejó, como dice fosforito, por expreso pedido de Sobich... Al principio no lo podía creer, pero después reparé también en el detalle de su aumento de peso y, sobre todo, como les pasa, no sé por qué, a la mayoría de los que dejan la merca, en que le había crecido mucho la cara, lo notaron?

Anónimo dijo...

es su opinión, supradyn, digo, no sólo la de que los artistas necesitan de vicios --yo no lo creo--, sino de que Asís sea un artista --un payaso, puede ser.

Anónimo dijo...

fosforito:

no hay que generalizar... no todos necesitan vicios pero la gran mayoría seguro que si...

asís es un gran artista... no tengo dudas de eso... es un buen escritor pero, sobre todo, un gran orador... un hablador (se le puede decir charlatán, no es un insulto) de profesión... definidor implacable... de paso le mando el chivo de su blog: www.jorgeasisdigital.com

a disfrutar!!!

saludos,

supradyn

Anónimo dijo...

Es cierto, Asis tiene un peinado raro, como si tuviera meningitis o hidrocefalia.