1/16/2007

RUTAS ARGENTINAS

Hace un par de semanas escuchaba al maestro Traverso explicar que la caída en la pasión por el TC respecto a los años setenta ya no sólo estaba dada por el predominio actual, casi absoluto de FORD desplazando a Chevrolet y Torino de la grilla de ganadores sino, y fundamentalmente, en una circunstancia bien interesante: Decía el flaco que en los setenta mientras un TC desarollaba 270 km por hora promedio , un auto de calle de serie promedio no circulaban a más de 120 km/hora. Hoy los autos de serie obviamente circulan en las rutas comunmente superando los 180 km/h de velocidad final , muchos alcanzan a superar los 200 km/h mientras los TC siguen en torno a las velocidades históricas, doblando más y con mayor seguridad, pero con velocidades finales similares a las de los años 70. Escuchándolo, asociaba esto con la enorme proliferación de accidentes que hoy vemos en las rutas con su trágica secuela de heridos y muertos y agregaba mi propia experiencia en el manejo en ruta. Suelo viajar a la costa frecuentemente fuera de temporada y promedio para recorrer 400km tardo 3 horas, a veces algo menos. Varias veces tuve la sensación de que a esa velocidad final - y el auto pedía algo más - no tenía la más mínima posibilidad de tomar ninguna desición de manejo , digamos que el coche te lleva y uno se deja llevar, alucinando que la situación es la inversa. No veo cómo se resuelve este dilema sin limitar desde su fabricación la velocidad final del automóvil. Apelar al autocontrol es dudoso y en mi caso de resultados pobres, de hecho no funciona conmigo y por lo que veo con muchísmos más . Sinceramente creo que en promedio, ninguno de nosotros puede viajar, aún sin un milímetro de alcohol o sustancias por ahí, a más de 150 km/h con vehículos de calle en muy buenas, perfectas condiciones de uso decidiendo efectivamente en el volante qué y cómo hacer las maniobras. Por otra parte, ele stado de la inmensa mayoría de las rutas y caminos nacionales no admiten mayor velocidad. Que pasa si por ley se establece limitar la velocidad máxima de los automóviles desde su salida de fábrica tal como sucede con los micros?. Seguramente se viola algún derecho o quizá alguna ley invisible acerca de la producción, circulación y consumo de mercancías ene special las más sofistícadas en el capitalismo tardío... pero, que pasaría? Moriría menos gente por accidente de tránsito al menos con los vinculados al exceso de velocidad en vehículos de calle que son muy numerosos y crecientes?. No lo sé con certeza, creo que sí, pero lo de Traverso, me quedó.

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