10/18/2021

noviembre está llegando...

Encuestas fallidas, nuevos paradigmas y los dilemas para noviembre

Lo sondeos preelectorales fallaron y hay dudas sobre el futuro. El rechazo de los encuestados, problemas metodológicos y de costos. Incógnitas respecto del ausentismo y posibles comportamientos








Las Paso de 2019, y más aún las del 12 de septiembre, ofrecieron grandes sorpresas. Y contradijeron a la casi totalidad de los encuestadores, incluso dramáticamente en el orden (1º y 2º de las fuerzas políticas) y ya no sólo en el puntaje estimado. En ambos casos se preveía un triunfo ajustado del peronismo, pero en 2019 ganó por 16 puntos y ahora perdió por diez.

Fue un fracaso rotundo de las encuestas de opinión pública. ¿Por qué? Según distintos dirigentes y consultores entrevistados por La Capital, los problemas para captar la voluntad política de los votantes son de distinto orden: metodológicos, tecnológicos, de costos de la encuesta, las dificultades de la pandemia y, principalmente, la incapacidad de predecir la tendencia electoral.

“El castigo al oficialismo se expresó, en buena medida, en la no concurrencia, con una demanda social y económica muy insatisfecha. Luego, en las encuestas, a la hora de proyectar indecisos, se priorizó la marca por sobre los candidatos y sin dudas la preponderancia de la marca del Frente de Todos (FdT) era más fuerte, pero no así los candidatos”, explicó el consultor Artemio López, de estrecho vínculo con el oficialismo y quien tuviera una relación personal con Néstor Kirchner durante su ascenso político a principios del milenio.

Bajo la lupa

Varias voces que analizan el fracaso de las encuestas y su incertidumbre a futuro lo explican por la imposibilidad de acceder al encuestado (rechazan consultas telefónicas). Sin embargo, también las boca de urna del 12 de septiembre erraron mal y provocaron un verdadero estrépito, incluso las contratadas por ambas agrupaciones políticas principales.

En ese caso, el sistema consiste en colocar al encuestador en la puesta de la escuela y preguntarle al que sale luego sufragar: no es posible culpar al teléfono que no contesta. “Hay un problema con el despliegue nacional de la encuesta, de construcción de la muestra y metodológico. Prácticamente no hay ninguna empresa que esté en condiciones de afrontar esa tarea, básicamente por un tema de costos”, comentó el consultor Raúl Aragón, coincidiendo con su par López.

Por su parte, el consultor Federico Aurelio explicó que en la semana previa al 12 de septiembre veía una zona de indecisos muy grande, pero que los contabilizaba como votantes del Frente de Todos de 2019 que estaban en situación de “compás de espera” con un gobierno que no había cumplido sus expectativas, pero que tal vez le estaban dando la última oportunidad. No ocurrió. Con todo, Aurelio, como varios de sus colegas, previó un triunfo ajustado del oficialismo, cuando al final de la noche se convirtió en derrota por diez puntos.

También está la dimensión de época que la herramienta de la encuesta electoral no suele captar: las novedades políticas. Esto se viene observando en muchos turnos electorales. La encuesta normalmente va detrás de los grandes quiebres e irrupciones que ofrecen los procesos políticos.

Los consultores plantean que el gran dilema se expresa en el rechazo a las encuestas de parte de los ciudadanos, el fin del teléfono fijo como sistema tradicional de comunicación y la dificultad con los celulares y las redes sociales. “Por un tiempo, hasta que se estabilice un nuevo modo de encuestar fidedigno, esto funcionará a prueba y error, no hay otra posibilidad”, deslizó Aragón.

Según López, y a pesar de sus fallas evidentes, las encuestas seguirán siendo un insumo determinante en la práctica de la mayoría de la dirigencia política.

“La medianía de la política utiliza encuestas todo el tiempo, las consumen con gran ansiedad y seguirá así, como una religión. Una especie de fe que crece a medida que la clase política aumenta su desconexión con lo que está ocurriendo alrededor. Para descubrir que en la Argentina hay hambre en amplios sectores populares no era necesario que te lo diga una encuesta. Era cuestión de caminar, un contacto elemental”, disparó Artemio, incluyendo a un sector de la dirigencia del espacio político al que adscribe.

Con una salvedad, según el consultor: “La de los grandes políticos que no las usan, excepto para situaciones especiales, posicionarse u operaciones determinadas. Pero los grandes políticos no toman sus decisiones en base a las encuestas, puede ser peligroso. Hoy la opinión pública te apoya, mañana te rechaza. Ningún gran dirigente cambió la historia política de su época mirando encuestas y decidiendo en ese sentido”.

Cuenta regresiva

A menos de un mes de las generales de noviembre, y más allá de las encuestas que no fueron, en el FdT circulan todavía los debates _aunque ya no públicos_ respecto de por qué se perdieron las Paso y cuál es el rumbo para intentar revertirlo.

La tesis más mencionada en la pública refiere a que ese 10 por ciento de argentinos que no se presentó a votar en septiembre (por debajo de la concurrencia histórica, que se ubica en 76 y 78%) “fueron mayoritariamente electores del FdT de 2019 que no tuvieron ánimo, no les dio la nafta para molestarse hasta la urna, pero dentro de ese universo Alberto Fernández conserva un 60% de imagen positiva”.

La tesis peronista, autocompasiva o no, agrega que el despliegue de políticas sociales y económicas de estas semanas hasta el 14 de noviembre agregarán los litros de nafta necesarios para que los más humildes vayan hasta la escuela y ratifiquen el pronunciamiento por la fórmula presidencial que hicieron en 2019. Otros, en cambio, incluso dentro de las filas más lúcidas del peronismo kirchnerista, advierten con asombro un evidente avance del partido amarillo en las zonas metropolitanas de casi todo el país.

Escenario

En el Area Metropolitana de Buenos Aires (Amba) observan distintos dirigentes, más como pregunta que como análisis acabado, que se ha constituido en una región en la que, aspiracionalmente, circula un discurso similar al de la Capital Federal. Caras, discursos, propuestas, actitudes: se está asimilando una idea de pretender vivir como en la ciudad de Buenos Aires.

La penetración del discurso de la derecha con epicentro en la Capital Federal estaría siendo tomada por amplios sectores populares. Un habitante de Quilmes hoy esgrime valores y aspiraciones similares al de un porteño medio. Claramente, el ciudadano de Quilmes no es un porteño medio, pero sin embargo aspira a serlo y, en consecuencia, también se inclina por esa representación política (Juntos por el Cambio, JxC).

El fenómeno electoral de la centroderecha en las zonas metropolitanas es impactante, reconocen dirigentes del FdT. “Eso de esperar que lleguen los votos del segundo y tercer cordón ya no funciona”, suelen admitir dirigentes del peronismo, sobre todo luego de la elección de septiembre. Desde ya, la pregunta sin respuesta es si la Paso fue una anomalía. O si la anomalía fue la derrota de Mauricio Macri en 2019.

Después de Macri, el país es otro, analizan en el FdT. La penetración de las ideas neoliberales es profunda y se expresa, en el caso de Javier Milei, en la ciudad de Buenos Aires. Hay un cambio del sentido común, de paradigma, de búsqueda.

“El peronismo con hambre no es peronismo”, expresó el intelectual kirchnerista José Pablo Feinmann. “Las condiciones materiales continúan teniendo preeminencia: el voto no es sólo por el bolsillo, pero tampoco es contra el bolsillo”, agregó López.

La idea de “una vacuna un voto” no dio los resultados que el gobierno esperaba. La incógnita sigue abierta y noviembre está llegando.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

no conozco a nadie que responda encuestas telefonicas. Artemio con la mano en el corazon... vos las respondes cuando te llaman o cortas como todo el mundo?

LO QUE RESTA DEL DIA dijo...

Como hablábamos con el Negro Montes en una entrevista radiofónica, la excepción a esas àreas metropolitanas es Rosario, donde el peronismo ganó en la categoría a senadores nacionales y perdió por apenas 2000 votos a diputados. Situación muy distinta a CABA, Cordoba, Mendoza, MardelPlata, La Plata, etc. Quizás buena potencia del candidato ganador d la interna: Marcelo Lewandoski, por lo demás, tanto el peronismo como el sector más dinámico q es el kirchnerismo, adolece d falta d construcción política. Habrá q investigar...