1/21/2021

caba: retrocesos sin precedentes

Desempleo
Ciudad: hay 200.000 ocupados menos que antes de la pandemia

Son datos del tercer trimestre de 2020 de la Dirección de Estadística y Censos porteña.



Protesta de médicos municipales

Ismael Bermúdez

Aunque mejoró con relación a los meses más críticos de la cuarentena, en relación al mismo trimestre del año anterior, los indicadores laborales de la Ciudad de Buenos Aires del tercer trimestre de 2020 “evidencian un deterioro profundo con retrocesos sin precedentes en las series históricas de actividad y empleo y en las condiciones laborales y de vida en general” y “casi casi todos los indicadores están aún lejos de los valores que tenían antes de la pandemia", según la Dirección de Estadística y Censos porteña.

La población ocupada porteña sumó en el tercer trimestre 2020 un total de 1.347.980, poco más de 100.000 más que en el segundo trimestre, pero un 12,9% menos que los 1.547.787 del tercer trimestre de 2019. Son 199.807 ocupados menos

A su vez, “ la tasa de desocupación persiste en un nivel alto para la serie histórica”: los desocupados sumaron 208.531, apenas menos de 3.000 respecto del segundo trimestre de 2002, pero por encima de los 180.938 del tercer trimestre de 2019.

Los asalariados porteños son los más afectados porque “se reduce 14,6% respecto al mismo período del año anterior, contracción más profunda que la de la ocupación en su conjunto (12,9%) y de la población por cuenta propia (6,7%). La reducción es incluso mayor en el segmento de trabajadores sin acceso a la seguridad social (35,2%)”.

En tanto, “casi 2 de cada diez personas asalariadas se encuentran en condición de precariedad laboral (o sea que sus empleadores no les efectúan descuentos jubilatorios)”, mientras “dentro de la población de jóvenes asalariados, casi 3 de cada 10 están en situación de precariedad laboral, lo que ilustra las distancias que los separan del trabajo con protección social”..

La población asalariada representa el 74,3% de la población ocupada en el trimestre, con una disminución de 1,4 puntos porcentuales en su porción, a favor de la población que trabaja por cuenta propia.

La situación de los cuentapropistas es muy crítica. El Informe oficial porteño dice que “el 31 % de la población por cuenta propia reconoce una situación de irregularidad en el registro y/o en el pago para el ejercicio de la actividad. La elevada incidencia de la informalidad se verifica con mayor intensidad entre la población que trabaja por cuenta propia no profesional. La emergencia sanitaria agravó las desigualdades preexistentes, ya que una parte importante de estos trabajadores quedó enmarcada fuera de las actividades esenciales. Cabe mencionar, por ejemplo, la actividad de comerciantes, plomeros, gasistas, electricistas o prestadores de servicios personales como manicuras, podólogos, peluqueros, entre otros, que se vio truncada debido a las medidas de aislamiento y distanciamiento social”.

Por su parte, “el servicio doméstico es uno de los grupos ocupacionales que se ve especialmente afectado por la emergencia sanitaria. La población ocupada en esta actividad reviste estructuralmente un peso importante en la economía de la Ciudad (cercano a 5%) y aún mayor en el empleo femenino (cercano a 10%). A pesar de los avances en la normativa, antes de la pandemia, dos tercios de las trabajadoras domésticas se encontraban en condición de precariedad (sin descuento para jubilación)”.

El empleo de las mujeres está más afectado que el masculino. “Las mujeres se ven especialmente afectadas por la emergencia sanitaria en el plano laboral, por la mayor incidencia del empleo informal, por el peso que tienen las ocupaciones de servicios -afectadas por las medidas que limitan las actividades- y por la importancia del empleo en servicio doméstico”, señala el Informe porteño.

No hay comentarios.: