Como hace exactamente un mes, Macri vuelve a utilizar el escenario Cresta Roja para anunciar formalmente el inicio del segundo ciclo de flexibilización laboral y tercero de desmoronamiento de la legislación protectiva, como modalidad jurídica de la baja en el costo laboral argentino, uno de los objetivos centrales de su gobierno.
Paradojalmente o no, Cresta Roja le hace síntoma y habla sobre el proyecto no explícito de Cambiemos respecto a la organización del trabajo asalariado que se espera obtener ( veremos si resulta) en esta tercera fase neoliberal iniciada el 10 de diciembre del año anterior.
En su momento el 21 de Abril pasado, el presidente hizo un autoelogio por la reactivación y recuperación de puestos de trabajo en la avícola Cresta Roja, ocultando la feroz represión inicial a la protesta de trabajadores de los que fueron reintegrados finalmente menos de la mitad y lo fueron sujetos ya a contratos temporarios y rebajas salariales sustanciales.
Escribía Pablo Urso entonces:
Un rato antes del mediodía de ayer el presidente Mauricio Macri habló desde la fábrica de Cresta Roja en Esteban Echeverría, que empezó a faenar nuevamente este lunes. Lo hizo, fiel a su estilo, montando un show bien amarillo. Se presentó rodeado de la gobernadora María Eugenia Vidal, ministros nacionales y provinciales y el intendente K de Echeverría Fernando Gray. A su lado estaba la nueva patronal OvoProt S.A., que es la cabeza del consorcio encargado de la reactivación, favorecido por el negociado inmenso que el macrismo les regaló en bandeja. Pero hubo una mayoría ausente, que no se vio en el acto. Un puñado de menos de 50 trabajadores presentes demostraba que la enorme mayoría de los obreros entendió que no tenía nada que agradecer ni reinvindicarle al macrismo. Entre los elogiados por Macri no faltó la Comisión Interna, garante de la situación actual donde la mayoría de los trabajadores no fueron reinstalados aun a sus puestos.
En medio de la crisis de los Panamá Papers, los despidos en sectores estatales y privados, una inflación galopante y el descontento creciente por los tarifazos en el transporte y los servicios básicos -que resulta un frente de tormenta pesado si se desata- el macrismo se jugó a presentar un “avance”, algo concreto que demuestre que su plan funciona en la realidad; para eso no tuvo mejor idea que poner a Cresta Roja como ejemplo.
Cinismo ilustrado
Entre las frases más cínicas de su discurso, el presidente se animó a decir "como cuidamos a los trabajadores de Cresta Roja, queremos cuidar a todos" elevando al nivel de ejemplo nacional la reactivación de la empresa y la supuesta recuperación de empleos. Pero en esa frase se encierra el verdadero plan de gobierno del macrismo para los trabajadores: rebaja de salarios, precarización, represión si hay resistencia y más concesiones para las patronales.
Como decíamos , las condiciones reales en Cresta Roja dejan poco que festejar a los trabajadores; obreros con 30 o más años de antigüedad en la empresa son tomados con contratos precarios por unos meses, con una rebaja del salario cercana al 30 % (sumando la inflación, el poder adquisitivo de los trabajadores de Cresta cayó como mínimo un 50%) a lo que se suma un aumento del ritmo de trabajo.
Mayor explotación y represión al trabajador, menores costos de producción, beneficios y más ganancias para los empresarios resulta ser la confesión solapada de los planes de Macri, extensivos a nivel nacional.
Macri y el PRO contra la prohibición de los despidos
En el escenario donde eligió declarar que de la pobreza “se sale con trabajo" faltan justamente miles de trabajadores que no fueron reincorporados a sus puestos y cuyas familias sobreviven con míseros $ 6 mil que el gobierno pretende que devuelvan cuando cobren sus indemnizaciones. Por eso la exigencia central, sostenida y votada desde las asambleas a lo largo de estos meses, es que todos tienen que volver a trabajar inmediatamente, y no solo una parte de los obreros. En ese escenario Macri también se declaró en contra de prohibir los despidos...
Hoy la historia vuelve a repetirse y el escenario Cresta Roja es utilizado para anunciar el veto a legislación laboral protectiva.
Nada nuevo en los gobiernos neoliberales. El primer acto de gobierno de la dictadura que instaló el neoliberalismo a mediados de los años 70 fue suspender la aplicación de la ley de Asociaciones Profesionales y su plexo garantista, hasta en el año 1979 finalmente derogarla,
Recuperada la democracia, tras la fallida intentona de Ley Mucci impulsada por el Radical Alfonsín para regimentar la vida sindical y atenuar la legislación protectiva , fue el Peronista Carlos Menem el que flexibilizó la legislación laboral y luego el Radical De La Rúa el que intentó la reforma laboral con la famosa Ley Banelco.
Hoy, la "la nueva derecha" piloteada por el ceócrata Maurício Macri veta legislación protectiva y desde el minuto cero de su gobierno propicia despidos masivos al tiempo que oferta el modelo Mac Donald.
Combina el modelo de inicio del ciclo laboral de los argentinos que oferta Macri salarios que no cubren el valor de la Canasta FIEL de Indigencia para un hogar tipo, precariedad y flexibilidad de la mano de obra junto a subsidio estatal a la empresa multinacional, todo legitimado por el 20% de desempleo abierto, 60% de informalidad y salarios un 50% por debajo del promedio para igual carga horaria y actividad que sacude hoy al tramo poblacional que va entre los 18 y 30 años .
Hoy, la "la nueva derecha" piloteada por el ceócrata Maurício Macri veta legislación protectiva y desde el minuto cero de su gobierno propicia despidos masivos al tiempo que oferta el modelo Mac Donald.
Combina el modelo de inicio del ciclo laboral de los argentinos que oferta Macri salarios que no cubren el valor de la Canasta FIEL de Indigencia para un hogar tipo, precariedad y flexibilidad de la mano de obra junto a subsidio estatal a la empresa multinacional, todo legitimado por el 20% de desempleo abierto, 60% de informalidad y salarios un 50% por debajo del promedio para igual carga horaria y actividad que sacude hoy al tramo poblacional que va entre los 18 y 30 años .
Todo de manual, la vieja nueva derecha.
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