Esperando ansiosamente cada año, los fanáticos nunca supieron exactamente lo que les esperaba, pero sabían que sería de proporciones épicas y una experiencia única que solo Zappa y su hábil grupo de músicos podrían brindar. Cuando Zappa regresó a The Palladium en Nueva York en 1981 para una carrera de cinco espectáculos de cuatro noches del 29 de octubre al 1 de noviembre, la tradición casi anual fue aún más anticipada de lo habitual ya que los conciertos de 1980 se interrumpieron debido a que Zappa se enfermó. Curiosamente, no hubo gira de otoño el año anterior y, por lo tanto, no hubo espectáculos de Halloween.
Zappa regresó a The Palladium con una nueva banda con tres nuevos músicos: Scott Thunes en el bajo, Chad Wackerman en la batería y Robert Martin en los teclados, uniéndose a los miembros veteranos Ray White en la guitarra, Ed Mann en la percusión y Tommy Mars en las teclas. El “pequeño virtuoso italiano” Steve Vai, ahora en su segunda gira como miembro de la banda. Si bien el grupo solo había estado de gira durante un mes, cuando se llevaron a cabo los espectáculos de Halloween, estaban al unísono cuando subieron al escenario y ofrecieron actuaciones sensacionales noche tras noche.
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