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El ex vocero de Alfonsín, deploró que Macri haya usado a Boca para alcanzar el poder

Polak, ex interventor en el club de la Ribera, hace un rico relato, en la que se mezclan las pasiones, el deporte, los negocios y la política.

POR ARNALDO PAGANETTI

En pocos días más, el ex vocero de Raúl Alfonsín y ex interventor en el club Boca, Federico Polak, trazará un paralelismo – con resultados diferentes – entre la gestión de Mauricio Macri, al frente de uno de los clubes más populares de la Argentina y de la Presidencia de la Nación.

Lo hará a través de un libro “Armando a Macri”. Su primera referencia es al dirigente de los xeneixes, el empresario Alberto J. Armando, quien estuvo 22 años al frente de la institución, en dos gestiones y obtuvo 12 títulos; y al actual mandatario nacional, empeñado en lograr la reelección, el próximo 27 de octubre, a pesar de la diferencia de más de 15 puntos que le sacó en las PASO del 11 de agosto, la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner.

Bodar en la noche tuiteó ayer que sin Polak, Boca no hubiese tenido al DT Carlos Bianchi, a la estrella Juan Ramón Riquelme, la copa Intercontinental, o el triunfo contra el @realmadrid. “Hasta el estadio pudo haber perdido”.

Lo cierto es que a través de numerosas entrevistas (Macri se le negó), Polak, desarma la historia de edulcorada que pretende imponer el actual titular del Poder Ejecutivo. Los testimonios que recoge, entre otros, son los de Carlos Heller, Heber Mastrángelo y Hugo Santilli.

Hincha de Racing, Polak cuenta como Macri fue decorando su vidriera política y construyó poder, con colaboradores de confianza a los que luego llevó a su lado para administrar el país como “un hombre de negocios”, pero esta vez con pésimos resultados económicos.

Hoy son cercanos a Mauricio, el titular del club, Daniel Angelici (un operador judicial denostado por “Lilita” Carrió), su delfín Christian Gribaudo (con desempeño en la provincia de Buenos Aires); Andrés Ibarra y Francisco Quintana, vicepresidente primero de la Legislatura porteña.

Polak asume la intervención en los 80, luego de la compra de Diego Armando Maradona a Argentinos Juniors, que provocó un agujero negro en las finanzas del club.

Polak no simpatiza con Macri y lo reconoce. Asegura que si Raúl Alfonsín viviese “sería un claro opositor”. El que le dio el empuje definitivo para tomar las riendas de Boca fue el peronista misionero Ramón Puerta, relata Polak, que fue suegro de Al Pacino y es abuelo de la novia del actor Leo Di Caprio.

En el prefacio del libro, Polak recuerda que en 1983, el entonces secretario de Estado norteamericano, Henry Kissinger (arquero en su juventud, en Alemania), quiso difundir el fútbol en Estados Unidos a través del Cosmos de Nueva York.

Al padre Franco Macri, le ofrecieron comprarlo pero le pareció “un disparate”. El que se entusiasmó con la idea fue el joven Mauricio, pero la adquisición finalmente no pudo concretarse.

“Orlando Salvestrini y Mauricio Macri sueltan al cielo neoyorquino una promesa que hará historia: en algún momento de sus vidas pondrán en marcha un plan de negocios en Boca Juniors, el club de sus amores”.

Para Polak ahí hay “un detalle que escapa a la inteligencia de Macri: el Cosmos es una franquicia, se compra, se vende, cambia de localía o de nombre…Boca, por el contrario, es un mojón esencial que forma parte de la cultura argentina, integra el folklore nacional, es inmortal”.

“Macri no percibe la diferencia. Transcurre el inicio de su carrera empresarial. Es un hombre de negocios. Los hombres de negocios – resalta – están preparados para hacer negocios, es lo que hacen. Es lo que él personalmente continuará haciendo durante toda su vida”.

Polak reconoce que Boca “continúa siendo el cuadro más popular, pero paralelamente se ha transformado en una empresa de la era digital, donde cohabitan el deporte, los negocios y la política”.

Tras hacer alusión a los cambios, menciona que “un estadio repleto, en el caso de Boca, la Bombonera, es una minúscula porción de la industria del fútbol” ya que afuera de la cancha “hay millones, en ocasiones miles de millones, frente a una pantalla, una Tablet, un celular”.

Polak elogia a Alberto J. Armando, al que definió como “un influencer del fútbol espectáculo desde mucho antes de que efectivamente existiera en la realidad. Eleva a Boca al escalón más alto de su historia”.

“La historia de Boca es una pasión que se mantiene en el tiempo, que supera en intensidad y duración a las otras pasiones, que ha traspasado todas las modas, que no se abandona en la desgracia”. Para Polak es cuestionable la utilización de un club de tamaña envergadura “como herramienta para alcanzar, o retener poder”.

El libro se lanzará el viernes de la próxima semana, en la Universidad del Museo Social Argentino, Corrientes 1723, a las 18.45., con la presentación de Sergio Olguín.