El Economista dialogó con Francisco Durañona (Intendente de San Antonio de Areco)
Por Pablo Varela
El intendente de Areco, Francisco Durañona, dialogó con El Economista, luego de los anuncios de la gobernadora María Eugenia Vidal en la mejora de programas sociales, y de que los intendentes peronistas reclamaran la declaración de “emergencia”.
El hombre de Unidad Ciudadana expresó críticas a la visión “conurbanizada” de la política y aseguró estar dispuesto a dar una discusión “a fondo” ligada a gobiernos locales.
¿Cómo evalúa la eliminación del Fondo Sojero?
Me cuesta verla de manera aislada. Es parte de un avance permanente contra las autonomías municipales y el sistema federal, contra el buen gobierno de provincias y municipios. Entra en la lógica del ajuste permanente. Es grave en varios sentidos. Por un lado por un cuestión fiscal y presupuestaria, con más de dos mil municipios que tienen aprobado contar con esos fondos en 2018, con obras en ejecución. El segundo daño y más importante, es a la gente, porque este fondo es afectado para obras de infraestructura de gran impacto social, en los territorios, en los barrios, en los sistemas de salud. Son soluciones directas para la comunidad. Lo que viene en la Argentina en términos de ajuste es muy grave.
Hubo anuncios de Vidal en la mejora de programas sociales. Hubo también una foto de colegas de ustedjunto a funcionarios bonaerenses. ¿Cómo evalúa esos hechos?
En primer lugar me parece que el rol de los intendentes no es ir a pedir la emergencia. No creo en el efecto de declarar emergencias. Lo que hay que hacer es ocuparse. Una vez desatada por malas decisiones políticas, hay que ocuparse de resolverlas. No me parece que le demos soluciones a la gente declarándolas, más bien lo contrario. Creo que tendemos a colaborar con el mal humor social. Es la provincia la que tiene que encargarse de resolver las situaciones de emergencia y es el Presidente el que tiene que encargarse de resolver la emergencia, que él mismo ha reconocido cuando en un spot grabado llamó a enfrentar a quienes resisten el cambio. Las consecuencias son muy graves con los hechos vividos hace días con la docente en Moreno. Si la máxima autoridad convoca a enfrentar a los que resisten el cambio, no me extraña que sucedan cosas así.
Marcó diferencias con otros intendentes. ¿Cómo trabaja para darle una mirada del “interior” al peronismo bonaerense?
Es el gran problema que tiene la política argentina, y no es exclusiva del peronismo, aunque el peronismo en las últimas décadas ha contribuido a instalarlo y es la “conurbanización” de la política. Que todo pase por la ciudad de Buenos Aires y los municipios del conurbano. Me parece que se deja de observar una parte fundamental del país como el interior, que tiene características y situaciones totalmente distintas, donde vive una enorme mayoría de argentinos y que hoy no forma parte de la agenda ni de Macri, ni de Vidal, pero tampoco del peronismo. Es el error de concentrarse en los territorios que tienen gran volumen electoral, pero que han proporcionado derrotas históricas. Se obtienen victorias en los centros urbanos, pero a nivel provincial y nacional se convierten en derrotas. Todo el peronismo y la política nacional quedan como rehenes de lo que sucede en el conurbano. No hay estrategia, no hay mirada para el interior y se terminan perdiendo todas las elecciones. En el 2017, en el interior de la provincia, la ola amarilla fue total salvo alguna excepción. Sin embargo en los municipios del conurbano, Unidad Ciudadana obtuvo resultados favorables, pero a nivel provincial se perdió. Es llamativo que no hayamos aprendido esa lección. En el interior nos plantamos fuertemente en exigir que la agenda tiene que pasar por una mirada de arraigo, de transporte, de acceso vinculado a la vivienda, de fomentar el desarrollo local.
Expresó su vocación de ser candidato a gobernador el año próximo. ¿Cuenta políticamente con los intendentes del interior?
Obviamente es muy difícil esa posibilidad, justamente porque toda la discusión política se concentra en los grande centros urbanos y nada indica que se pueda salir de ahí. Además hoy nuestro espacio carece de una construcción clara, es indiscutible el liderazgo que tiene Cristina, pero hoy no hay una conducción, una organización clara, que defina cuales son los pasos a seguir. Con lo cual la posibilidad de la dirigencia del interior de ocupar un lugar en la discusión electoral es difícil. Aun así, el propósito es dar esa discusión a fondo.
Areco fue distinguido por su política de “arraigo”. ¿Cómo está la gestión local?
Nuestra gestión avala una mirada exitosa sobre el arraigo y el rol de los gobierno locales. Eso va en sintonía con lo que sucede en el mundo, en donde el rol de los gobiernos locales en el Siglo XXI es el más determinante de todos. Hoy se exige proximidad, y eso está en los gobiernos locales para lo vinculado a la vida de las familias, la generación de empleo, el desarrollo industrial, la educación y salud. Es es lo que queremos para los 135 distritos, que tienen que ser los actores fundamentales del Siglo XXI.
Relacionado
No hay comentarios.:
Publicar un comentario