9/16/2017

hacia un nuevo tipo de unidad histórica - " no son todos lo que estaban, ni están todos los que eran"

Hoy, que resuena con sentido la vocación de "Unidad", hay que sostener como Néstor Kirchner lo hiciera en el muy difícil contexto del año 2008, "unidad sí, para bajar banderas , no"

Es que el tipo de unidad histórica - social y política-  que plantearon Néstor y Cristina está crujiendo. No son todos lo que estaban, ni están todos los que eran. Los procesos políticos llevan a eso. Todo lo que se consolida en un momento histórico y se construye como unidad, social y política. con el tiempo cambia, muta, hay agregación y pérdida . 

Domina finalmente la sentencia de Marx y todo lo sólido se desvanece en el aire. El proceso de mutación en el tipo de unidad es histórico-concreto , inexorable y no se detiene "diciendo" que se ha detenido.

Pasó siempre en el peronismo: El tipo de unidad que planteó Perón en los comienzos a mediados del siglo pasado, no fue el mismo que el de los años setenta, y ese tipo de unidad setentista estalló en el año 1974 y no fue el mismo que se materializó con Menem en la primera etapa 1989-1995, que a su vez se transformó a partir del año 1995 y no replico el tipo de unidad política y social del año 1989. 

Nos referimos  al tipo de unidad social y política que acompaña un proceso político le da sostén, anclaje. En esta perspectiva es seguro que el tipo de unidad social y política que planteó Néstor y profundizó Cristina en el lapso 2003-2015 comience a mutar y cambie en otra perspectiva en esta etapa de oposición al neoliberalismo

En esta dirección de análisis, recordemos que el peronismo le debe literalmente "la vida" a Néstor y Cristina. Por eso mismo dan pena los llamados "peronistas no kirchneristas" que cacarean "peronismo puro" y corren ( a quién?) con "la doctrina", ignorando o negando que si en el año 2003 no hubiera aparecido Néstor, el peronismo estallaba en mil pedazos. Era en la práctica una federación de partidos que no tenía unidad orgánica posible, de hecho se presentó a elecciones en abril del alño 2003 dividido en tres listas irreconciliabres: Menemismo, Kirchnerismo y Peronismo histórico. 
Las cosas sucedieron como ya todos sabemos en mayo del año 2003 y el peronismo hoy es kirchnerismo, porque sin la fase kirchnerista, el peronismo sencillamente ya no era más. En el fondo, la discusión que persiste y esta hoy agigantada en los medios opositores , es si el peronismo es algo más que el kirchnerismo. 

Habría, para algunos políticos y teóricos, una propiedad que el peronismo tiene por sobre el kirchnerismo, y esa es una discusión que hay que dar,  porque tiene consecuencias políticas muy importantes. 

Si se considera  que el kirchnerismo es una etapa acotada del peronismo, que en definitiva es un despliegue histórico , político y social mayor que lo supera, se toma una determinada política coyuntural y estratégica que comienza siempre por acotar, suspender, encapsular el liderazgo de Cristina.

Si se observa que el kirchnerismo expresa plenamente lo que inauguralmente expresaron Perón y Evita , que el kirchnerismo es hasta hoy al menos, la modalidad histórica concreta que asume el peronismo, surge otra determinación, estratégica y coyuntural que comienza siempre por reconocer el liderazgo de Cristina sin limitaciones. 

Por otra parte en lo electoral, nunca pudo ser sustentable la idea de que hay un plus del peronismo no kirchnerista por fuera del kirchnerismo "duro", al contrario, en la últimas elecciones se mostró que esa hipótesis es falsa y en rigor cuando aparece el "peronismo" despojado de kirchnerismo, también se despoja electoralmente. Todos los opositores que negociaron un acompañamiento amigable al drástico oficialismo neoliberal, electoralmente resultaron muy debilitados. 

Contrario sensu, Unidad Ciudadana, un espacio opositor frontal y sin concesiones, fundado dos meses antes de las PASO por Cristina Kirchner ganó , en lógica y necesaria alianza con otros espacios en los distritos de Buenos Aires, Santa Fe, Chubut, Tierra del Fuego, Río Negro, Catamarca y Formosa. Distritos que sumados representan el 55% del padrón nacional de electores. Menos Pagni y más análisis, agenda y contenidos propios, compañeros.

Finalmente es necesario decir ahora que asumir las transformaciones inexorables en el tipo de unidad histórica, política y social del lapso 2003-2015 sin perder la vocación de mayorías, es el gran desafío de la etapa opositora, tarea compleja, sin duda, pero inevitable y dadas las circunstancias, contra todo lo dicho por los analistas y medios no solo oficialistas, es difícil imaginar un comienzo más sólido para el nuevo formato de representación inaugurado por Cristina Kirchner .

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