El gobierno de la Alianza Cambiemos busca impulsar la reforma del régimen penal juvenil mediante un anteproyecto de ley en el cual se plantea bajar de 16 a 14 años la edad de imputabilidad. La iniciativa reavivó el debate en el marco de un año electoral y ante casos como el del asesinato en Flores joven Brian Aguinaco.
Por Esteban Rodríguez Alzueta*
(para La Tecl@ Eñe)
El sociólogo norteamericano, David Matza, en un libro que fue publicado hace un par de años en Argentina, Delincuencia y deriva, señalaba que tenemos una imagen distorsionada de los jóvenes que a veces quebrantan la ley, y que por eso mismo la respuesta frente a esos casos además de exagerada es muy equivocada. Para Matza, la mayoría de los jóvenes supera su etapa delictiva. Crecen y hacen las paces con el mundo; les salen barba y usan otra ropa, encuentran trabajo o se alistan en las fuerzas de seguridad, se casan y tienen hijos, se van corriendo del estereotipo “sospechoso” y la policía deja de molestarlos también. En otras palabras, la gran mayoría de esta minoría de jóvenes que cometen delitos de manera amateur o hacen bardo a una temprana edad deja de hacerlo sin necesidad de que intervengamos todos nosotros. Más aún, todo indicaría que esta suerte de “reforma madurativa” ocurre independientemente de la intervención de las instituciones correccionales y de la calidad del servicio correccional. No estoy diciendo que haya que mirar para otro lado, pero lo que miremos conviene hacerlo guardando su real proporción.
Buster Keaton decía que cuando uno mira el mundo por el ojo de una cerradura, la realidad se vuelve una tragedia. Si tomamos los hechos extraordinarios como prácticas ordinarias ponemos a las cosas en un lugar donde no se encuentra. Movemos la realidad pero contra los jóvenes más vulnerables. Por el contrario, cuando abrimos el plano, estamos en mejores condiciones para evitar otra bola de nieve. Problemas multiacausales requieren respuestas multiagenciales, es decir, alianzas entre las distintas agencias del estado. La cárcel no es la mejor respuesta. En realidad no es la mejor respuesta para ningún delito. Mucho menos cuando estamos hablando de delitos cometidos por niños, niñas o adolescentes.
Estoy convencido que uno de los problemas que tenemos en la sociedad Argentina, además de la negrofobia, es la manera de ocultar este problema a través de justificaciones morales que no tienen ningún asidero comprobado. Se cree, por ejemplo, que a lo niños hay que agarrarlos de chiquitos, porque, como decía mi director del colegio secundario, “hoy tiran una tiza y mañana ponen una bomba”. O como decía George Kelling, uno de los mentores de la Tolerancia Cero: “Quien roba un huevo roba una vaca”, es decir, quien puede lo menos puede lo más. Se cree que para evitar los grandes delitos hay que ser implacables de entrada, es decir, hay que demorarse en los pequeños eventos de la vida cotidiana que si bien a veces ni si quiera constituyen un delito estarían creando las condiciones para que aquello suceda. No todos los que tiramos tizas nos convertimos en tirabombas o los que alguna vez robamos una chocolate en un kiosco nos convertimos en ladrones profesionales. Ni siquiera, me atrevo a decir, la gran mayoría.
Lo cierto es que el encarcelamiento, en cualquiera de sus formas, lejos de resolver los problemas termina agravándolos. No solo porque estigmatiza más aún a esos jóvenes, sino porque contribuye a deteriorar los vínculos en su comunidad, profundizando los malentendidos sociales, porque no les agrega ninguna capacidad que les permita estar en mejores condiciones para conseguir un trabajo digno, porque se los excluye del mercado laboral formal o se los margina en el sistema de educación formal, etc. En vez de recibir una sobreprotección se los vulnerabiliza aún más. No es de esperar que esos jóvenes, otra vez en la calle, después de haber transitado “una temporada en el infierno”, sean dóciles y compasivos con todos nosotros. La bronca vendrá con sordina y le agregará más violencia a los conflictos que se buscan hoy desandar. No es una profecía y tampoco una amenaza. Basta con revisar el derrotero en esta materia en los últimos 15 años. Por eso, como escribió alguna vez Jean Genet: “si no salváis a los negros, morirán. Y otros vendrán para mataros”.
La Plata, 6 de enero de 2017
*Investigador de la UNQ y director del Laboratorio de estudios sociales y culturales sobre violencias urbanas. Autor de Temor y control y La máquina de la inseguridad. Integrante del CIAJ y la Campaña Nacional contra la violencia institucional.
3 comentarios:
HAY COSAS QUE SE TRATAN DE OLVIDAR, SIEMPRE SE RECUERDA LA EPOPEYA DE PROGRESO SOCIAL DEL POBRE GRINGO, QUE VINO DESTRUIDO DE EUROPA.
Y LA PATRIA O SEA LOS BLANCUZCOS Y LOS NEGROS Y LOS GRINGOS VIEJOS LOS RECIBIERON BIEN Y SUS HIJOS YA NO FUERON NI PETIZOS SOCIALES, NI LOCOS DE LA GUERRA, NI IGNORANTES COMO EN MUCHOS CASOS FUERON SUS PADRES.
PERO YO CRIOLLO BLANCUZCO RECUERDO LA EPOPEYA DE PROGRESO DE LOS BLANCUZCOS Y LOS NEGROS, GENTE BUENA CON POCA EDUCACION QUE CONSTRUYO SU CASA HIZO PROGRESAR SU BARRIO, SUS HIJOS SE EDUCARON CONSIGUIERON MEJORES EMPLEOS.
Y HASTA AQUÍ LLEGO LA EPOPEYA DE PROGRESO, VINIERON MALOS GOBIERNOS NEOLIBERALES, CREARON DESEMPLEO, RESECION PASARON DECADAS DE FALTA DE OPORTUNIDADES.
PERO LO DE LOS NEGROS, QUE NO SON TAN ASÍ COMO SUS APELLIDOS LO INDICAN SON DESENDIENTES EN MUCHOS CASOS DE LA NOBLEZA ESPAÑOLA QUE SE REPARTIÓ ESTAS TIERRAS, TAMBIEN DE INDIOS Y GRINGOS VIEJOS Y NUEVOS.
HAN TENIDO CASI TODAS LAS ETNIAS SU MOMENTO DE GLORIA Y SU MOMENTO DE DECADENCIA TANTO AQUÍ COMO EN EL VIEJO MUNDO.
ESTE ES UN PAÍS DONDE VOLVIENDO A LOS PRINCIPIOS DE TENER EN CUENTA A TODOS, UN BUEN FUTURO ES POSIBLE Y CASI SEGURO QUE EN TODO EL MUNDO ES ASÍ.
EL NEOLIBERALISMO ES DESORGANIZACION POPULAR ES BASURA A FAVOR DE DOS O TRES CURREROS.
Aparentemente un menor de 14 mató a a otro menor de 14 = todos en cana, los menores de 14.
Dicen q hallaron dueños de yates q ¿cobraban la jubilación mínima mínima? y recibían medicamentos al 100%= a todos los jubilados revisados y sin el monto de hasta 5 medicamentos al 100%
1ª) es archi sabido qu no llegan al 2% del total de delitos graves , los cometidos por menores, o sea esos, que bien pocos son, pueden muy bien ser analizados para determinar el origen de la conducta agresiva, dañina de esos todavía niños, y que están amparados por las convenciones a las que adhiere nuestra constitución , que bien podría el sr Garavano repasarla y cumplirla
2ª es muy posible que esos ricachones q cobran la mínima, sean los autónomos que jamás han recibido una jubilación acorde a sus aportes, que por ejemplo en el caso de médicos o ingenieros, u otros profesionales, va creciendo en escala de aportes por el solo hecho del paso del tiempo de su matriculación... pero q al jubilarse reciben una jubilación minima. Porqué? no se, pero si es como dig, bien pueden tener el beneficio de un % de medicaciómn como todos los de la minima, en lugar de sancionarlos a ellos y a todo el especto de jubilados
Se pueden presentar amparos???
CUANTO DINERO DE LA TORTA DELICTIVA DE MILES DE MILLONES DE DOLARES ANUALES LES TOCA A LOS JOVENES MENORES DE 14 Y SIN ABOGADOS CON ESTUDIO DE NOMBRE DE JUEZ QUE LOA HAGA SAFAR.
DEL DINERO DE LA TORTA DELICTIVA LOS MENORES DE 14 AMOS SIN BUEN ABOGADO MANEJAN EL 0.004 POR CIENTO.
Y EL RESTO QUIEN LO MANEJA?? NO SABRAN ALGO DE ESTO LA FAMILIA UNITTA, EL CITIBANCO, LOS PIRATAS DE MORGAN.
CAPAZ QUE HASTA EL CENTRAL SABE DEL ASUNTO Y EN VEZ DE HABLAR SE PONE HA QUEMAR EXPEDIENTES LINDA CUEVITA EL CENTRAL.
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