12/05/2016

híper concentración del ingreso y fin de la moderación en la crisis de la globalización

El agotamiento de las socialdemocracias europeas a mano de experiencias popular-nacionales radicales, muchas de derecha conservadora, se corresponde con la polarización que hoy se observa en las elecciones en EE.UU. y el avance de la derecha conservadora en América Latina.

La crisis del PSOE, el partido que orientó la transición española tras la dictadura franquista, el agotamiento del Partido Socialista francés, la agonía de la hoy moderada Syriza, la emergencia del “extremista” Jeremy Corbin y los resultados del Brexit, el declinar de la socialdemocracia alemana tiene su contrapartida.

Por debajo de todas estas novedades está el agotamiento definitivo de las experiencias de centro “moderado” que irrumpieron con fuerza durante los años ochenta y permanecieron exitosas hasta mediados de primera década de este siglo.

El colapso de la tercera vía resulta entonces un movimiento general expresado globalmente a nivel electoral, correlacionado con la expansión de la desregulación típica de la actual fase financiera y su crisis a mediados de la década pasada con la fortísima concentración del ingreso que supuso y sobre la que el informe reciente de Oxfam es contundente: la desigualdad extrema en el mundo está alcanzando cotas insoportables. Actualmente, el 1% más rico de la población mundial posee más riqueza que el 99% restante de las personas del planeta. 

El poder y los privilegios se están utilizando para manipular el sistema económico y así ampliar la brecha, dejando sin esperanza a cientos de millones de personas pobres. El entramado mundial de paraísos fiscales permite que una minoría privilegiada oculte en ellos 7,6 billones de dólares. Para combatir con éxito la pobreza, es ineludible hacer frente a la crisis de desigualdad.

Agoniza así, de la mano de la megaconcentración del ingreso y urbi et orbi la “amplia avenida del medio”, sostenida en su momento en las figuras ya emblemáticas de Bill Clinton en los EE.UU., Tony Blair en el Reino Unido, Gerhard Schröder en Alemania, Felipe González en España, François Mitterrand en Francia, Raúl Ricardo Alfonsín en la Argentina, Fernando Henrique Cardoso en Brasil.

Néstor Kirchner vio antes que ninguno la creciente polarización de la opinión pública tras su certera lectura de la crisis del año 2001 en el país –anticipatoria de otras crisis planetarias– y desplegó con gran precisión conceptual, política y electoral una experiencia popular democrática continuada por Cristina Kirchner, que nunca sucumbió –en 12 años de gestión y cinco desafíos electorales resueltos exitosamente– a la estrategia de moderación extrema.

En esta perspectiva, nuestro país no parece ser la excepción y no hay espacio tampoco para “la tercera vía”. Comienzan a observarse con creciente nitidez, ya pasada la borrachera electoral, dos liderazgos antagónicos, irreconciliables que expresan a su vez dos modelos polares de organización económica, social, política y cultural, que no dejan espacio a terceros.

Mauricio Macri, emergente del recomienzo del neoliberalismo bajo el formato de populismo conservador de centroderecha y con una matriz de megaconcentración del ingreso en su modelo socioeconómico y Cristina Kirchner, representante del modelo sustitutivo con inclusión, bajo la forma de populismo progresista de centroizquierda y con un plexo de distribución del ingreso en su diseño social y económico.

Estas son las dos alternativas reales y antagónicas que seguramente signarán el comportamiento electoral de nuestro país en el corto y mediano plazo, ambas bien alejadas de la tan venerable como anacrónica “tercera vía”, hoy depositada en casi todo Occidente en el desván de los trastos en desuso. 

Y no hay ni habrá ya lugar para la moderación política que supuso el tercerismo y, por el contrario  se profundizará la polarización y el antagonismo , en tanto lejos de mejorar, la concentración del ingreso crece de manera exponencial y año tras año es mucho más intensa.

Se modela así un futuro de enfrentamientos crecientes,  y no solo políticos, entre aquellos que todo lo poseen y quieren más , en con enorme creciente disputa antagónica con grandes contingentes de ciudadanos excluidos y sin destino cierto con formatos de representación político electorales extremos, que prometen restituir los ciclos de ascenso social que fueron la fortaleza del capitalismo durante décadas frente a regímenes de acumulación y formas políticas que intentaron ser su alternativa cuyo formato más potente tuvo su final en los inicios de los años noventa con la caída del muro de Berlín, ciclo final que acaba de cerrarse simbólicamente con la muerte de Fidel la semana que pasó ,




Leemos respecto al avance de la mega concentración del ingreso en esta etapa de la globalización:

El 1% de los adultos posee el 51% de la riqueza del mundo; el 10% el 89%; mientras que el 50% inferior sólo tiene el 1%

Michael Roberts

  

El 1% superior de los adultos posee el 51% de la riqueza global, mientras que la mitad inferior de los adultos posee sólo el 1%. De hecho, el 10% superior de los adultos posee el 89% de toda la riqueza del mundo! Esta es la nueva cifra para el 2016 calculada por el informe anual de la riqueza global de Credit Suisse. Cada año, Credit Suisse presenta este informe, escrito por el profesor Tony Shorrocks, James Davies y Rodrigo Lluberas, que solían elaborarlo para la ONU. Suelo referirme a él cada año y por lo general es el una de mis notas más populares.
La última vez que traté de los resultados del informe de Credit Suisse, el 1% tenía el 48% de la riqueza global.  Así que, en el último año y medio, la desigualdad global según el informa ha aumentado aún más. La proporción del 1% y 10% superiores de la riqueza mundial se redujo entre 2000 y 2007: por ejemplo, la proporción del percentil superior se redujo del 50% al 46%. Sin embargo, la tendencia se invirtió después de la crisis financiera y las proporciones de las partes superiores han vuelto a los niveles observados a comienzos del siglo.
Los investigadores de Credit Suisse estiman que estos cambios reflejan principalmente la importancia relativa de los activos financieros de los hogares, que han aumentado en valor desde 2008, haciendo crecer la riqueza de muchos de los países más ricos, y de muchas de las personas más ricas, en todo el mundo. Aunque la proporción de los activos financieros se redujo este año, las partes de los grupos de riqueza superiores continuaron aumentando. En el otro extremo de la pirámide de la riqueza mundial, la mitad inferior de los adultos posee colectivamente menos del 1% de la riqueza total.
La razón principal de esta enorme desigualdad es que hay muchos pobres (en términos de  riqueza) en el mundo. No se necesita mucho para entrar en el top 1% de los poseedores de riqueza. Una vez deducidas las deudas, una persona sólo necesita 3.650 dólares para estar entre la mitad más rica de los ciudadanos del mundo. Sin embargo, se necesitan alrededor de 77.000 dólares para pertenecer al 10% de los dueños de la riqueza mundial y 798.000 dólares para ingresar en el 1% superior. Así que si es dueño de una casa en cualquier ciudad importante en el Norte sin hipoteca, usted es parte del 1% superior. ¿Se siente rico si es así? Lo único que demuestra esto es lo pobre que son la gran mayoría de las personas en el mundo: sin propiedad, sin efectivo y ¡sin acciones y bonos, por supuesto!
La investigación muestra que 3.500 millones de personas - el 73% de todos los adultos en el mundo- poseen bienes e ingresos inferiores a 10.000 dólares en 2016. Otros 900 millones de adultos (19% de la población mundial) están en el abanico de los  10.000 a 100.000 dólares. Los pobres se concentran en la India y África y las naciones más pobres de Asia, con un 73% de ellos en los quintiles inferiores en términos de riqueza. Pero también hay un número significativo de personas que son pobres para los estándares mundiales en América del Norte y Europa, entre ellos un 9% de los norteamericanos, la mayoría con un patrimonio neto negativo, en el quintil inferior mundial y el 34% de los europeos en la mitad inferior mundial. Estas personas no sólo no tienen riquezas, es que están endeudados.
¿Y quienes están cada vez mejor? Bueno, no son indios. La India tiene solo el 3,1% de las personas de “clase media” a nivel mundial (una riqueza de entre 10.000 y 100.000 dólares) y esa proporción prácticamente no ha cambiado. Por el contrario, China cuenta con un enorme 33% de las personas de riqueza media, diez veces la de la India, y esa proporción se ha duplicado desde el año 2000. Lo que esto nos dice es que la expansión económica sin precedentes de China ha sacado a cientos de millones de personas de la pobreza, incluso si la desigualdad de riqueza ha aumentado.
De hecho, el número de millonarios, que se redujo en 2008, mostró una rápida recuperación después de la crisis financiera y ahora es más del doble de su cifra del 2000. En la actualidad hay 32.9 millones de millonarios a nivel mundial, es decir, adultos con más de 1 millón de dólares en propiedades o ahorros después de descontar sus deudas. De hecho, sólo hay 140.000 personas en todo el mundo que tienen más de 50 millones de dólares de riqueza. Y ahora hay más de 2.000 multimillonarios, que son realmente los dueños del mundo.
Suponiendo que no haya cambios en la desigualdad de riqueza mundial, se espera que haya otros 945 multimillonarios más en los próximos cinco años, elevando el número total de multimillonarios a casi 3.000. Más de 300 de los nuevos multimillonarios serán de América del Norte. China, según estos cálculos, sumará más nuevos multimillonarios que toda Europa junta, situando el total de China por encima de 420.
Credit Suisse estima que la riqueza global total es ahora de 334 billones de dólares, o alrededor de cuatro veces el PIB mundial anual. A comienzos de este siglo, hubo al principio un rápido aumento de la riqueza mundial, con un crecimiento más rápido en China, India y otras economías emergentes, lo que representó el 25% del aumento de la riqueza, a pesar de que poseían sólo el 12% de la riqueza mundial en el año 2000. La riqueza mundial se redujo en 2008, pero ha mostrado una lenta tendencia al alza desde entonces, con una tasa significativamente más baja que antes de la crisis financiera. De hecho, la riqueza ha caído en dólares en todas las regiones fuera de América del Norte, Asia-Pacífico y China desde el año 2010. Per cápita por adultos, la riqueza apenas ha crecido y la riqueza media ha caído cada año desde 2010. El adulto promedio es cada vez más pobre.
En los últimos 12 meses, la riqueza mundial ha aumentado un 1,4% y apenas ha podido mantener el ritmo de crecimiento de la población. Como resultado, en el año 2016, la riqueza media por adulto se mantuvo sin cambios por primera vez desde 2008, aproximadamente unos 52.800 dólares. Así que la población mundial en su conjunto no se ha hecho más rica en el último año y medio, pero la desigualdad ha aumentado.
Para más información sobre la desigualdad de riqueza e ingreso y lo que significa, ver mis Ensayos sobre la desigualdad.
es un reconocido economista marxista británico, que ha trabajador 30 años en la City londinense como analista económico y publica el blog The Next Recession.
Fuente:
https://thenextrecession.wordpress.com/2016/11/24/top-1-of-adults-own-51-of-the-worlds-wealth-top-10-own-89-and-bottom-50-own-only-1/
Traducción:

G. Buster

1 comentario:

Anónimo dijo...

BREXIT, TRUMP, RENZIT ...

MAURI AISLADO DEL MUNDO ?