Seamos objetivos: el gasoducto del Nordeste fue el primer gran anuncio del presidente Kirchner, junto con Paolo Rocca, el principal ejecutivo de la multinacional Techint, en un acto en la Casa Rosada donde no faltaron presencias chaqueñas. Se hablaba de una inversión de 10.000 millones de dólares
También es cierto que ese gasoducto del NEA -casi trece años después de aquel lanzamiento- es la única obra con financiamiento nacional que no pagó el alto costo de su paralización en la transición gubernativa de Cristina Kirchner a Mauricio Macri.
Y una tercera verdad es la que alarma a los genuinos intereses del Chaco y de las otras tres provincias (Formosa, Corrientes y Misiones), el único núcleo del país que carece de abastecimiento gasífero en redes domiciliarias, conexiones industriales y otros servicios, como consecuencia de que la información disponible en el más alto nivel gubernativo y parlamentario advierte que el Ministerio de Energía de la Nación está acelerando estudios con las empresas Enargas y Enarsa para introducir recortes presupuestarios que suspenderían los montajes de las instalaciones de superficie, es decir las plantas de regulación de presión y de acondicionamiento del gas para su utilización.
En buen romance, nos dejaría en la banquina y se consumaría lo que fue la concepción unitaria inicial del proyecto: inyectarle gas procedente de yacimientos de Bolivia a la zona núcleo, es decir, el eje centralista encabezado por el puerto de Rosario y la ciudad de Buenos Aires. Esta es la encrucijada que merece una actualización informativa como la que intenta esta página y debería generar una gran movilización ciudadana de las garrafas, para que el país sepa cuánto nos cuesta comprarlas básicamente para cocinar y calefacción, con diferencias irritantes de desigualdad, como también ocurre con las tarifas eléctricas: lo que acaba de actualizarse, reduciendo subsidios para ambos rubros en el ámbito metropolitano, no se aproxima ni por milagro a los que deben afrontarlos usuarios chaqueños o del resto de la región. ¿Acaso la gente no empieza a advertir el fuerte incremento de las boletas de Secheep, en medio de una encrucijada financiera de alto riesgo para la distribuidora de esta provincia?
(O para hacerlo más sencillo: hemos comprobado esta semana cuánto se paga viajando en taxi en Buenos Aires con un recorrido largo que se iguala con el costo de un remis desde algún barrio hasta el centro de Resistencia. ¿Qué esperan los remiseros para hacerse escuchar o creen que aún con estos precios de los combustibles siempre tendrán clientes con recursos que los requieran, así como piensa el insólito ministro de Transporte de Macri, para el cual los boletos aéreos no deben tener techo porque los paga la clase pudiente de la Argentina?).
Este es un retrato de la peor geopolítica, porque muestra un país al revés. El territorio de mayores ingresos es favorecido con los servicios más baratos y, por el contrario, las regiones con los sueldos más débiles deben pagar los servicios más caros.
Un 45 por ciento hecho
El Ministerio de Infraestructura aprecia que el 45% del tendido del gasoducto en el ámbito chaqueño, con proceso de fabricación de la calderería, estructuras metálicas y equipamiento, con elementos que se recibirán en breve y las referencias surgen del trabajo de dos UTES: una es BTU-Eusuco-Víctor Contreras y otra es Contreras Hermanos-Helport-CPC-Rovella Carranza, para lo que trata del “caño de aproximación”, o sea de enganche con el troncal que arrancó con el “Juana Azurduy” desde la frontera con Bolivia y baja por Formosa, paralelo a la ruta 11, para culminar en el norte de Santa Fe (el ramal troncal está a cargo de tres UTES: Chediak-UCSA-Conta SRL, otra es BTU-Esuco-Víctor Contreras y la tercera Techint-Panedile.)
El recorrido previsto es de 172 kilómetros de gasoducto troncal y 615 kilómetros de derivación, en lo que hace al Chaco, con caños de tres dimensiones y una inversión de 2.000 millones que tendrá que llegar a 4.233 millones, tomando el presupuesto de adjudicación.
Si se quiere ver el movimiento de las dos empresas instaladas en Sáenz Peña y ocupando más de un hotel con su personal calificado, puede apreciarse la movilización de gente y equipos en la zona de Presidencia de la Plaza. Existen perímetros de destronque y deslinde, como en los tiempos del trazado de las rutas que se pavimentaron.
Detalles chaqueños: el tramo troncal abarcará Margarita Belén, Colonia Benítez, Resistencia, Barranqueras y Basail, en el límite con Santa Fe. El gasoducto por aproximación debe abastecer a 34 comunidades (Pampa de Infierno queda afuera).
La obra completa del Gasoducto del Nordeste contempla 4.144 kilómetros de gasoductos troncales y de aproximación para abastecer a 168 comunidades de seis provincias: una de Salta, 31 de Formosa donde se contempla la conexión entre El Colorado y General San Martín, 34 del Chaco ya citadas, 37 de Santa Fe y 65 más entre Corrientes y Misiones.
¿615 km de cañerías inútiles?
Una tremenda inversión se convertiría en inútil si esos 615 kilómetros en el territorio chaqueño, como una vía muerta, no se complementan con las plantas reductoras de conexión con la red de comunidades ya citada, donde no podrá estar ausente el ingreso del gas al parque industrial de Puerto Tirol, el más importante de la provincia que sigue creciendo.
El recorte que está en manos del ministro Aranguren y su equipo se fundamentaría en la falta del tendido de redes de distribución en la provincia, lo que supone un consumo cero y un elevado quebranto para la explotación de la obra.
Es todo inviable sin esas redes y las plantas que las habiliten. Ningún inversor pondrá un peso para financiar la red secundaria en 34 comunidades si la conexión está en el aire como esa concesión que data de 1997 a la empresa Gas Nea para el tendido de redes y que continúa vigente.
En su momento, desde la jefatura de gabinete, Jorge Capitanich procuró fuentes de financiamiento para esas redes, pero nada podrá retomarse sin las conexiones sujetas a la amputación de Aranguren. No solo se trata del Chaco, sino de toda la región: corregir la injusticia de la única zona del país sin ese servicio es un imperativo que el gobierno nacional no podrá eludir, cuando insiste en el pomposo anuncio de las transformación del norte con su Plan Belgrano.
Esta racionalización presupuestaria no resiste ningún análisis técnico, ni financiero, ni económico, ni social, ni mucho menos político.
Valga este último dato elaborado por funcionarios del gobernador Peppo: hay 222.088 hogares aptos para sustituir el gas en garrafas por el fluido natural en zonas urbanas. La cobertura en el primer año de esta obra sería de 60.000 viviendas. Se podría llegar a 333.012 metros cúbicos diarios de consumo residencial, pero hay que tener en cuenta al comercio, a la industria que se sale de la vaina por una proyección con esa base y cubriría un 30% de la demanda, las centrales eléctricas se llevarían el 34% y el gas en garrafas bajaría a un 6% de consumo en el nuevo escenario.
La marcha de las garrafas
Que la movilización no se demore y que la reacción de toda una provincia que tiene derecho a un mejoramiento sustancial de su calidad de vida se fundamente en un acto de justicia frente al centralismo en una pulseada que pone a prueba la identidad chaqueña, que se forjó venciendo a las adversidades y que debe plantear un jalón de federalismo para que empiece a dar vuelta esa geopolítica invertida, de la Argentina que pregona pero no cumple con el rescate de regiones como la nuestra que sin rutas renovadas, sin ferrocarril, sin una hidrovía plenamente aprovechada, tendremos un destino de segunda o perdedor, como lo representa el abandono a su propia suerte de la cadena de valores que se inicia con el esfuerzo de nuestros productores algodoneros y la imparable desaparición de las cooperativas que hicieron el Chaco.
Las coplas, todos los libros de Aledo Meloni, transmiten signos de vitalidad de toda una generación de bastiones de la cultura y de hombres cuya vocación de progreso y tenacidad son los paradigmas para vencer el silencio, la indiferencia o la especulación partidista en una encrucijada que nos compromete a todos.
Estrategia degobernadores
Todo indica que Córdoba, distrito electoral clave para la victoria de Mauricio Macri, será escenario el miércoles 18 de la cumbre de gobernadores para intentar el cierre de la negociación de un reparto signado por las desigualdades en favor de las provincias que obtuvieron fallos de la Corte favorables en la disputa por la Coparticipación Federal.
Los ingresos del mes de abril mostraron a la citada Córdoba, a Santa Fe y San Luis en una posición de privilegio, mientras que el Chaco debía resignarse con un 20,3 por ciento de incremento interanual, muy debajo de la escalada inflacionaria en ese mismo lapso.
La Casa Rosada está advirtiendo que la resistencia parlamentaria de la oposición agrava sus problemas y su política de ajuste, encabezada por el ya resistido ministro de Energía, Aranguren, que suma y sigue encendiendo la mecha del aumento de los combustibles y el tarifazo de servicios, ha encontrado un escollo fuerte con la ley que suspende los despidos por 180 días y que, aún con la insólita retención del trámite en el Senado, no impedirá el rechazo en la Cámara baja ante la intensa presión de todos las centrales sindicales (no es para menos el último dato que registra unos 140.000 despidos a partir de la drástica expulsión de gente en los organismos nacionales y el alto precio de la caída, por ejemplo, del empleo de la construcción, donde solo el Chaco acusa unos 10.000 trabajadores).
La propuesta superadora, al decir de los anticipos oficiales, que los ministros Frigerio y Prat Gay ofrecerían a los gobernadores no genera conformidad, por lo menos en el análisis previo del chaqueño Oscar D. Peppo, uno de los que acudió a la Corte Suprema en procura de la recuperación de ese 15% destinado a la Anses y un punto y medio más para la AFIP, que la presidente Kirchner reconoció al final de su mandato para embarrarle la cancha a Macri y obligarlo a cancelar la reparación con un decreto de necesidad y urgencia.
Frigerio propondrá que los gobernadores declinen una demanda que bien podría prosperar en la Corte, ofreciendo restituir ese 15% en cuatro años, con un 3% en éste para completar en el 2020, pero que no llegaría neto: la mitad en efectivo y la otra mitad para ir cancelando la deuda con la Nación, un paquete de 60.000 millones que el gobierno kirchnerista venía renovando en vencimientos trimestrales y pateando para adelante.
Otra oferta sería el auspicio de la Nación para que las provincias salgan a colocar bonos en el mercado, pero en el caso del Chaco el área de Relaciones con las Provincias que encabeza Alejandro Caldarelli ya dio luz verde para que avancen los sondeos dentro del sistema y después de que Neuquén pudo colocar esta semana unos 250 millones de dólares, el mismo monto que buscará Salta en junio y se estima que la administración de Peppo lo cierre a más tardar en julio.
Surge, entonces, que ningún gobernador llegará a poncho a Córdoba, sino bien afilado con las particularidades que tiene cada distrito: el Chaco, por ejemplo, madura el cumplimiento de transferencias de fondos hidráulicos para reanudar y terminar como máximo en dos años el gran acueducto con unos 500 kilómetros de recorrido. La firma de una addenda ya elevada al ministro Frigerio podría realizarse, si las rondas técnicas con el Enhosa y participación de Sameep terminan bien, en Hermoso Campo, ciudad elegida por Peppo como uno de los puntos terminales del bombeo desde Barranqueras.
Se sabe que los gobernadores justicialistas que acudieron a la Corte Suprema mantienen contactos de estrategia entre ellos y gestiones con el presidente del bloque de senadores, Miguel Picheto, y otras espadas parlamentarias, con miras a emitir una señal conjunta previa a la cita en Córdoba y que apuntará a mejorar sustancialmente lo que se conoce de la oferta de la Casa Rosada, dispuesta a pagar este año solamente 12.400 millones.
Y si se trata de la asistencia de organismos financieros internacionales, después de los anuncios del Banco Mundial y de la CAF aplicables a los cuatro años de mandato de Macri, el Chaco tiene una agenda ya planteada en distintos frentes nacionales con la apreciación, hasta ahora, que el Plan Belgrano es como un enorme dirigible que navega sobre el Norte Grande pero solo aterriza en Tucumán, la provincia del coordinador José Cano. Además de lograr, como pésima señal del comienzo, ese viento norte centralista que ordenó desviar desde Avia Terai la traza de la reactivación del Belgrano Cargas y de un plumazo desvalorizar al puerto de Barranqueras, olvidando acaso hasta la anécdota de que en esa estación fluvial se hizo fotografiar el presidente Macri en plena campaña electoral...
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