9/28/2015

pastafrola

“Voy contando los días: faltan 62 y no 32”, fue la frase que usó para motivar a ministros y legisladores en una reunión de Gabinete ampliado.Encuestas, promesas y spots de campaña.

El jefe de Gobierno porteño y candidato a presidente de Cambiemos, Mauricio Macri, les aseguró esta tarde a sus funcionarios que llegará sin problemas a la segunda vuelta electoral y brindó un discurso motivador para alentar a su tropa. “Voy contando los días: faltan 62 días y no 32”, dijo, levatando la voz, para señalar que disputará el ballotage.

Decidido a dejar el escándalo por las contrataciones de Fernando Niembro con su administración, el líder del PRO reunió a ministros, secretarios y legisladores en la Jefatura de Gobierno de Parque Patricios para delinear las estrategias de campaña y marcar el camino hasta el 25 de octubre.

Se trató de una reunión de Gabinete ampliada en la que hablaron el jefe de Gobierno, el secretario de Gobierno, Marcos Peña, y el jefe de Gabinete de ministros, Horacio Rodríguez Larreta.

El electo jefe de Gobierno habló en primer término, luego lo hizo Peña y más tarde el hombre encargado de los spots publicitarios que se presentaron esta tarde a todos los dirigentes partidarios.

Macri cerró la reunión con un discurso motivacional y pidió redoblar los esfuerzos de sus colaboradores de cara a las elecciones generales. El líder del partido amarillo se permitió bromear con “las cosas que dijeron que no íbamos a lograr”. Hizo un repaso sobre los logros electorales del PRO y la constitución de Cambiemos que, advirtió, el kirchnerismo apostaba a que nunca sucedería.

“Voy contando los días, faltan 62 días y no 32”, sostuvo Macri. El mensaje fue claro y los presentes lo entendieron a rajatabla. El líder del PRO se ve en el ballotage porteño y, por esa razón, pidió “dejar todo en la cancha”.

“Estamos bien, estamos para cambiar la historia”, deslizó a modo de arenga. Por los pasillos de la Jefatura se resaltó el discurso “emotivo” de Macri y todos evaluaron que sirvió para “terminar con la sensación de bajón”, luego del escándalo Niembro.

Naturalmente, una vez finalizada la reunión, entre los asistentes se habló de la coyuntura nacional. Mientras alguno se mofaban de la decisión deDaniel Scioli de bajarse del debate de candidatos presidenciales, otros apuntaban a Sergio Massa: “se va a caer en el último tramo. Se lo va a comer la polarización”.

“Estamos en la recta final, falta poco tiempo”, se le escuchó decir al jefe comunal en el coqueto auditorio de la sede de Gobierno de la Ciudad. También, pidió “solidez” y “convicción” a todos sus colaboradores.

A su turno, Larreta se refirió a la cuestión operativa de la campaña nacional y la porteña. “Hay que recuperar los votos que perdimos”, señaló en referencia a la diferencia de puntos que consiguió el PRO entre los comicios porteños y los nacionales. Algunos interpretaron que la intención fue remarcar que el espacio amarillo debe “sumar” más votos en la Ciudad, pero también en otros distritos del país.

Luego, tomó la palabra Peña. Ante la atenta mirada de Jaime Durán Barba, mostró una serie de encuestas que ubican al PRO en el ballotage del 24 de noviembre. Los números que barajan en la “mesa chica” amarilla ubican aDaniel Scioli con el 39 por ciento, Macri con 31 y Sergio Massa con 21 puntos.

Además, el secretario de Gobierno reveló que un sondeo advierte que el 60 por ciento de los argentinos “quiere un cambio” e informó acerca de otro que marca que el PRO es el partido con mejor imagen a nivel nacional.

Peña festejó que para las elecciones de octubre Cambiemos tendrá mayor espacio asignado en avisos publicitarios electorales que lo que obtuvo en el reparto de las PASO del 9 de agosto. Esto se debe, explicaron desde el macrismo, a la performance de las primarias.

Los spots presentados

Los dirigentes del PRO también fueron invitados a la reunión de Gabinete para ver la serie de spots publicitarios que tienen como protagonistas a Mauricio Macri, Gabriela Michetti y María Eugenia Vidal.

Además de la cuestión emocional, la actualización sobre el futuro de la campaña y el revelamiento de los números de las encuestas, los distintos funcionarios vieron los avisos que se estarán en la televisión próximamente.

En uno de ellos, Macri, sentado en una escalera, habla solo a cámara y explica las medidas que “no va a hacer”. En tren de diferenciarse del Gobierno nacional, advierte que no va a “mentir” con las estadísticas del INDEC, entre otras propuestas.

Quizás la apuesta más importante será con un spot en el que el candidato del PRO promete un millón de créditos hipotecarios y otros dos en los que habla sobre su proyecto de Pobreza Cero y el combate al narcotráfico.

El de Vidal, con la música emotiva de fondo, remarca la idea del cambio y la “esperanza”. Por su parte, la candidata a vicepresidenta, Gabriela Michetti, protagoniza un breve spot en el que advierte que el PRO garantizará la libertad de expresión.

Café, pastafrola y livings

Mientras Macri, Larreta y Peña hablaban, los dirigentes del PRO podían servirse café, sanguches de miga y hasta pastafrola. “Justo la que le gusta aScioli”, bromeó un diputado porteño.

Este viernes, en el marco de la campaña en la Ciudad, el macrismo sale a la cancha con la modalidad de los “livings”. Por medio de redes sociales o por teléfono un vecino se comunica con el equipo de comunicación de la campaña y ofrece su casa para que los candidatos se acerquen a presentar sus propuestas y charlar con otros vecinos. Todos se reúnen en el living de la casa y dialogan.

La idea es que a esos encuentros vaya un diputado nacional y un legislador porteño. Ese dúo participaría también en la reunión con vecinos de esa comuna.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Un lapsus revelador?
Dice: "El líder del PRO se ve en el ballotage porteño..."
En fin