1/23/2015

cultivar el suelo es fumigar a la patria

Encontraron restos de agrotóxicos en la sangre de una maestra de Gualeguaychú

Estela Lemes, la directora de una escuela rural de la zona, se realizó el análisis en el marco de una jornada en el Congreso Nacional y recientemente confirmó que tiene en su sangre “clorpirifos etil”, un insecticida para plagas. “Si es perjudicial para mi salud, iré hasta las últimas consecuencias para que ninguna persona más tenga que pasar por esto”, advirtió la docente.
La Plata, 22 Ene (InfoGEI).-Una fuerte preocupación se levantó en Gualeguaychú, luego de que se confirmara que Estela Lemes, directora de la Escuela Nº66 Bartolito Mitre, ubicada en la zona rural de Costa Uruguay, tiene agrotóxicos en su cuerpo.
La docente -junto a otros cuatro maestros rurales de Entre Ríos y otros representantes de la campaña “Paren de fumigar escuelas”- se había sometido a un análisis en noviembre del año pasado, en el marco de la audiencia pública “Escuelas Fumigadas” realizada en el Congreso de la Nación. En la ocasión, los entrerrianos además realizaron una extendida exposición sobre las consecuencias sufridas por las fumigaciones y pidieron a los legisladores una respuesta.
Los resultados del estudio bioquímico, que realizó gratuitamente la Red de Médicos de los Pueblos Fumigados en el Instituto de Análisis Fares Taie, de la ciudad de Mar del Plata, se dieron a conocer recientemente y confirman que Lemes tiene en su sangre “clorpirifos etil”, un insecticida para plagas.
“Lo único de lo que estoy totalmente segura ahora es que mi sangre está contaminada”, se lamentó la docente que milita la causa contra las fumigaciones hace varios años, y que realizó la primera denuncia en 2012, después de sufrir las consecuencias de una avioneta que sobrevoló la escuela de la que está a cargo.
En diálogo con El Día de Gualeguaychú, la directora señaló que “con los resultados en la mano, me empiezan a cerrar algunos otros síntomas que venía teniendo y que no sabía la razón. Si bien todavía no he consultado con un especialista, hace un tiempo, de buenas a primeras, se me inflama la cara, se me hinchan la boca y los ojos, y tengo problemas para respirar con normalidad. Pensé que era una alergia, hasta que recibí el resultado de los análisis”.
En este sentido, la maestra rural contó que, una vez que consulte a un especialista, resolverá si toma o no acciones contra los responsables de la situación que hoy le toca lamentar. “Si esta situación resulta perjudicial para mi salud, creo que es el momento de arremeter con todo e ir hasta las últimas consecuencias para que ninguna persona más tenga que pasar por esto”.
Finalmente, Lemes volvió a hacer hincapié en la necesidad de tomar conciencia. “Lo ideal sería que no se fumigue más, que se erradique la fumigación de este tipo. Pero sabemos que no es fácil, así que hay que aferrarse a lo poco que se ha conseguido hasta ahora y seguir luchando. En costa Uruguay, después de que nuestra lucha tomó estado público, los fumigadores han llevado las recetas, han hecho las cosas más prolijamente”, rescató, pero lamentó que “hace unas semanas denunciaron a vecinos de la ciudad que van hasta Costa Uruguay a tirar basura: eso refleja, entre otras cosas, la falta de compromiso del ciudadano común, más allá de los responsables directos de las fumigaciones”. (InfoGEI) Ga 

3 comentarios:

Mariano T. dijo...

Lo importante es cuanto.
Con los aparatos nuevos,que detectan ppb(partes por billón ) tenemos hasta uranio en la sangre.

Artemio López dijo...

y si, tiene síntomas y detectaron el plaguicida.

Mariano T. dijo...

Cuando detectas sintomas agudos de clorpirifos ya no la contas.
El único síntoma compatible de esta señora es la alergia, que ouede ser a muchas cosas.
La dosis letal es de 32mg/kg
O sea que con 4 gramos por via oral sos boleta.
Para una suegra hay productos un poco mejores, pero no muchos.
Además del campo, se usó mucho como insecticida domiciliario, para cucarachas, en el 1er mundo ya no sev usa en zonas urbanas, pero hay que desconfiar de los cucaracheros a domicilio.
En Cuba todavía se usa en ciudades para combatir mosquitos, pero hay productos menos tóxicos e igual o mas efectivos contra mosquitos.