 |
| Imagen creación del aún jóven Diego Paladino |
Leemos en Los Andes (hegemónico, ojo al piojo) las ocurrencias de un distrito que genera 4 (cuatro!) de cada 100 votos nacionales y no parece muy entusiasmado con la batalla cultural que, por ahora, es un empate clavado, aunque de final incierto.
El PJ de Mendoza ya piensa en adelantar las elecciones de 2013
Para ello, bastaría con la convocatoria del Gobernador, sin la necesidad de una reforma electoral. Sería para contrarrestar la candidatura de Julio Cobos como diputado nacional.
El gobernador Pérez estuvo ayer en los actos por el centenario de Villa Atuel junto al intendente sanrafaelino Emir Félix. (Gobierno de Mendoza)
Marcelo Zentil - mzentil@losandes.com.ar
La reunión se armó sobre la marcha, luego de un acto oficial en la Casa de Gobierno, y se prolongó con un almuerzo. Estaban el gobernador Francisco Pérez, el vice Carlos Ciurca, seis intendentes representativos de los distintos sectores internos del PJ y el presidente de la Cámara de Diputados Jorge Tanús.
Allí fue donde surgió el planteo, que ya venía dando vueltas en las cabezas de varios peronistas: desdoblar las elecciones legislativas de 2013, aunque no se apruebe la reforma electoral (ver aparte) que prevé separar por ley las elecciones provinciales de las nacionales.
Como el gobernador tiene la facultad de fijar la fecha de las elecciones, no es necesaria la reforma para ejecutar el desdoblamiento. Por eso bastaría que Pérez rompa con la "tradición" de unificar los comicios mendocinos con los nacionales para cumplir con lo sugerido por los referentes territoriales.
La idea, confirmada a Los Andes por tres de los presentes en esa reunión, tiene un fin claro: la supervivencia política. Hoy por hoy, sin empacho aunque en estricto off the record, en el PJ dan a Julio Cobos como ganador de la pelea si lidera la lista de diputados nacionales y quieren evitar a cualquier costo un posible efecto arrastre que le haga ganar a la UCR también bancas en la Legislatura y en los concejos deliberantes. En este escenario, se les haría difícil la gobernabilidad a Pérez y los intendentes.
El ex gobernador y ex vicepresidente radical ya blanqueó hace tres meses que se va a postular a una banca en el Congreso en las primarias del año que viene y cuenta con el apoyo de un sector mayoritario de su partido. Según las encuestas que circulan en las mesas políticas, es el político con mejor imagen de la provincia y "el único que hoy puede traccionar en una boleta", según el análisis de un dirigente de La Corriente.
Con esta jugada, además de definir una estrategia electoral, el PJ también quiere marcarle la cancha al radicalismo y obligarlo a avanzar con las negociaciones por la reforma constitucional, el proyecto que obsesiona al Gobierno y que parecía estancado hasta que un acercamiento oficial a Roberto Iglesias, el radical que compitió con Pérez hace un año, pareció reavivarlo.
"Estamos medio cansados de algunos radicales, que cambian de opinión de acuerdo a la coyuntura y la conveniencia propia. La idea es no dejarnos marcar la agenda por ellos, que un día quieren desdoblar y al otro no", se sincera el intendente de San Martín, Jorge Giménez, que participó de la reservada reunión junto a sus colegas de Las Heras (Rubén Miranda), Guaymallén (Alejandro Abraham), Carlos López Puelles (Luján), Joaquín Rodríguez (Tupungato) y Emir Félix (San Rafael).
¿Y Cristina?
Una fuente de la UCR, que había escuchado ya del plan peronista, le dio poca importancia: "El razonamiento de ellos es que si Cristina mete a La Cámpora en la lista de diputados nacionales, que sea ella quien pierda con Cobos. Pero la verdad es que se cagan en las patas de sólo pensar que deben ir a decirle que la van a dejar sola en la pelea con Julio".
La respuesta peronista a ese análisis opositor, que por cierto está basado en la relación del PJ local con el kirchnerismo nacional de los últimos años, suma varios argumentos.
"Es una decisión de todos y la respalda el esquema de poder territorial consolidado que tenemos. Igual, vamos a pelear contra Cobos en la nacional", se ataja un alto funcionario del Ejecutivo.
"La mayoría de las provincias ya tienen el desdoblamiento y la Nación las respeta", agregó Giménez. "Hoy, con las primarias nacionales y sin primarias provinciales, ya de hecho tenemos un desdoblamiento. No tiene sentido que estén unificadas las generales de Mendoza con las de la Nación", sumó otro de los protagonistas del encuentro peronista.
El rival
Las elecciones nacionales serían dentro de un año y dos meses antes las primarias. Por lo que los "desdobladores" oficialistas piensan en junio o julio como fecha local. Y aunque faltan al menos ocho meses para ese momento, ya sacan cuentas.
En el peronismo perciben un clima hostil a Cristina Fernández, como después del conflicto con el campo, y creen que eso potencia la figura de Cobos. En este contexto, estiman que el ex gobernador podría ganar la nacional por diez puntos a lo sumo porque "ya no es el de antes".
Ese Cobos "de antes" al que se refieren es el que lideró el Frente Cívico en 2009 y, respaldado por su voto "no positivo" contra las retenciones a las exportaciones de cereales, propinó al PJ mendocino una paliza histórica: 20 puntos de diferencia. Claro que el entonces vicepresidente no integraba la lista y ahora sí lo haría, por lo que en ese punto no es comparable.
"Cobos no es el cuco, pero si desdoblamos los que van a pesar en las provinciales son nuestros intendentes y la gestión de Paco", dice el peronista defensor del poder territorial y militante de La Corriente.
El razonamiento es el siguiente: si el PJ gana la legislativa mendocina, generará un efecto triunfalista que lo acercará a la UCR en la nacional. Para el oficialismo, un empate en la provincia y los municipios ya sería una victoria porque el año que viene la oposición arriesga más bancas como efecto de aquel triunfo de hace cuatro años.
¿Cuán avanzado está el plan peronista? "Setenta por ciento y creciendo", responde uno de los consultados. En unos días, habrá otra reunión con los mismos protagonistas y algunos otros que se sumarán para entrar en la etapa de definiciones.
Allí fue donde surgió el planteo, que ya venía dando vueltas en las cabezas de varios peronistas: desdoblar las elecciones legislativas de 2013, aunque no se apruebe la reforma electoral (ver aparte) que prevé separar por ley las elecciones provinciales de las nacionales.
Como el gobernador tiene la facultad de fijar la fecha de las elecciones, no es necesaria la reforma para ejecutar el desdoblamiento. Por eso bastaría que Pérez rompa con la "tradición" de unificar los comicios mendocinos con los nacionales para cumplir con lo sugerido por los referentes territoriales.
La idea, confirmada a Los Andes por tres de los presentes en esa reunión, tiene un fin claro: la supervivencia política. Hoy por hoy, sin empacho aunque en estricto off the record, en el PJ dan a Julio Cobos como ganador de la pelea si lidera la lista de diputados nacionales y quieren evitar a cualquier costo un posible efecto arrastre que le haga ganar a la UCR también bancas en la Legislatura y en los concejos deliberantes. En este escenario, se les haría difícil la gobernabilidad a Pérez y los intendentes.
El ex gobernador y ex vicepresidente radical ya blanqueó hace tres meses que se va a postular a una banca en el Congreso en las primarias del año que viene y cuenta con el apoyo de un sector mayoritario de su partido. Según las encuestas que circulan en las mesas políticas, es el político con mejor imagen de la provincia y "el único que hoy puede traccionar en una boleta", según el análisis de un dirigente de La Corriente.
Con esta jugada, además de definir una estrategia electoral, el PJ también quiere marcarle la cancha al radicalismo y obligarlo a avanzar con las negociaciones por la reforma constitucional, el proyecto que obsesiona al Gobierno y que parecía estancado hasta que un acercamiento oficial a Roberto Iglesias, el radical que compitió con Pérez hace un año, pareció reavivarlo.
"Estamos medio cansados de algunos radicales, que cambian de opinión de acuerdo a la coyuntura y la conveniencia propia. La idea es no dejarnos marcar la agenda por ellos, que un día quieren desdoblar y al otro no", se sincera el intendente de San Martín, Jorge Giménez, que participó de la reservada reunión junto a sus colegas de Las Heras (Rubén Miranda), Guaymallén (Alejandro Abraham), Carlos López Puelles (Luján), Joaquín Rodríguez (Tupungato) y Emir Félix (San Rafael).
¿Y Cristina?
Una fuente de la UCR, que había escuchado ya del plan peronista, le dio poca importancia: "El razonamiento de ellos es que si Cristina mete a La Cámpora en la lista de diputados nacionales, que sea ella quien pierda con Cobos. Pero la verdad es que se cagan en las patas de sólo pensar que deben ir a decirle que la van a dejar sola en la pelea con Julio".
La respuesta peronista a ese análisis opositor, que por cierto está basado en la relación del PJ local con el kirchnerismo nacional de los últimos años, suma varios argumentos.
"Es una decisión de todos y la respalda el esquema de poder territorial consolidado que tenemos. Igual, vamos a pelear contra Cobos en la nacional", se ataja un alto funcionario del Ejecutivo.
"La mayoría de las provincias ya tienen el desdoblamiento y la Nación las respeta", agregó Giménez. "Hoy, con las primarias nacionales y sin primarias provinciales, ya de hecho tenemos un desdoblamiento. No tiene sentido que estén unificadas las generales de Mendoza con las de la Nación", sumó otro de los protagonistas del encuentro peronista.
El rival
Las elecciones nacionales serían dentro de un año y dos meses antes las primarias. Por lo que los "desdobladores" oficialistas piensan en junio o julio como fecha local. Y aunque faltan al menos ocho meses para ese momento, ya sacan cuentas.
En el peronismo perciben un clima hostil a Cristina Fernández, como después del conflicto con el campo, y creen que eso potencia la figura de Cobos. En este contexto, estiman que el ex gobernador podría ganar la nacional por diez puntos a lo sumo porque "ya no es el de antes".
Ese Cobos "de antes" al que se refieren es el que lideró el Frente Cívico en 2009 y, respaldado por su voto "no positivo" contra las retenciones a las exportaciones de cereales, propinó al PJ mendocino una paliza histórica: 20 puntos de diferencia. Claro que el entonces vicepresidente no integraba la lista y ahora sí lo haría, por lo que en ese punto no es comparable.
"Cobos no es el cuco, pero si desdoblamos los que van a pesar en las provinciales son nuestros intendentes y la gestión de Paco", dice el peronista defensor del poder territorial y militante de La Corriente.
El razonamiento es el siguiente: si el PJ gana la legislativa mendocina, generará un efecto triunfalista que lo acercará a la UCR en la nacional. Para el oficialismo, un empate en la provincia y los municipios ya sería una victoria porque el año que viene la oposición arriesga más bancas como efecto de aquel triunfo de hace cuatro años.
¿Cuán avanzado está el plan peronista? "Setenta por ciento y creciendo", responde uno de los consultados. En unos días, habrá otra reunión con los mismos protagonistas y algunos otros que se sumarán para entrar en la etapa de definiciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario