4/26/2012

se expande el rechazo a la ortodoxia neoliberal


Señalamos en Ramble que uno de las mayores restricciones que enfrenta Sarkozy en la segunda vuelta electoral es eludir su lugar de furgón de cola de las políticas de ajuste alemanas, para resolver la crisis en la eurozona que son en general un fracaso.

Sobre el creciente rechazo a la ortodoxia neoliberal ahora en el viejo continente, leemos: 

La receta alemana, basada en imponer estrictos recortes y una reducción de salarios al menos al Sur de Europa, no funciona: Europa se enfrenta a un largo periodo de austeridad, recesión, desempleo y caída de los niveles de vida, el caldo de cultivo idóneo para los movimientos populistas. Cuanto más se prolonguen estas condiciones, más europeos se volverán en contra del euro, la inmigración y el libre comercio. Ese es el análisis que tienen encima de la mesa Washington y Pekín, que comparten los mercados, sean quienes sean los mercados, y hasta los propios líderes europeos, siempre en privado y con la boca pequeña. Pero no todo está perdido: la sospecha de que la medicina que Alemania está obligando a tragar a media Europa no sirve emergió hoy con fuerza en los discursos de los políticos europeos, de los banqueros centrales e incluso de los militares portugueses, tras la detonación que han supuesto las elecciones en Francia y las serias dificultades de Holanda, el alumno aventajado de Berlín, que ahora es incapaz de seguir sus pasos. Europa necesita crecer; no basta con el látigo de las reformas, de los recortes. No basta con usar la tijera: ese es el mensaje. Las miserias de Atenas, Lisboa y Dublín empiezan a verse en las calles de Madrid y Roma: palabras mayores. Y de alguna manera esos miedos están a las puertas de París y Ámsterdam, el núcleo duro de Europa: palabras aun mayores.

1 comentario:

Nando Bonatto dijo...

A un ministro chino se le atribuye un comentario un tanto sombrio para el futuro europeo
Museos y turismo en su futuro si continuan en este camino