el trípode de la muerte y el voto cruzado...

Leemos:

"Todos detrás de Cristina”, es la consigna unificadora de la Mesa de Trabajo del kirchnerismo provincial que hoy se reuniría por primera vez en el año, luego del receso de verano. La última cita de los dirigentes y sectores afines al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner fue en diciembre de 2010, donde compartieron una pata flambeada para cerrar el año y para celebrar el nacimiento de la Mesa, una iniciativa política a todas luces en construcción. Si no hay deserciones fuertes de último momento, hoy retomarán la agenda que los encuentra con el mismo problema aún no resuelto:

¿Cuarta lista o PJ? Hasta ahora, una parte importante pretende presentarse en las elecciones provinciales de este año con una lista K pura, fuera del ejido de José Manuel de la Sota y del gobernador Juan Schiaretti. Son los que dicen que “De la Sota es el límite”. Pero hay algunos sectores que apuestan a un acuerdo con el peronismo provincial para no debilitar las fuerzas de Cristina (si ésta finalmente intenta su reelección) en la provincia, en las elecciones de octubre. Son los que afirman: “Todo por el proyecto nacional”.

Por eso, a esta altura, casi la única certeza de grupo que reúne a Eduardo Accastello, Horacio Viqueira, Carmen Nebreda y el docente universitario Francisco Tamarit, entre otros, es justamente el enunciado que comienza estas líneas y que no produjo trabajo alguno que todos firmaran: “Todos detrás de Cristina”.

Esto mide 9%, similar escenario al Kirchnerismo puro en Santa Fe, donde ayer el mismo Hermes Binner me comentaba: "Cristina nos gana a nostros con votos propios especialmente en Rosario ". Así las cosas, la estrategia electoral provincial es dejar fluir el voto a Juez y Bonfatti en Córdoba y Sante Fe hacia la opción del FPV nacional en territorios que desdoblan elecciones.

La solución nacional en estos distritos es entonces impulsar o crear las condiciones para materializar el tradicional "voto cruzado" entre el conjunto de sectores K, PJ, Socialistas y Juecistas, que harán de Cristina la opción mayoritaria en primera vuelta, ganando en las dos provincias sin ballotage, a pesar de elecciones provinciales que, seguramente, de continuar este escenario de fragmentación del espacio panperonista, estarán muy por debajo de la opción nacional , en una relación de 4 a 1.

El tercer distrito clave para el FPV que respondió de manera muy pobre en 2009, integrante del trípode de la muerte, es Capital Federal. La opción local del FPV mide 20%, de manera indistinta respecto de los candidatos que la encabecen , es el espacio el que mide eso, y podría trepar a 22% con techo 25% , los candidatos son insignificantes para la primera vuelta.

Los candidatos del FPV sin embargo resultan equivalenciales en ballotage , para el cual deben deben manifestar atributos específicos para enfrentar esta segunda ronda inexorable en el distrito poteño, en especial poseer capacidad captar electorado no propio, independiente, de baja intensidad ideológica, alineado con otras alternativas porteñas en primera ronda.

Poco para dar batalla en primera vuelta, pero suficiente para ingresar al ballottage donde se definirá la suerte del distrito. Cristina alcanza el 30% de intención de voto en la Ciudad de Buenos Aires, ese plus, si se desdoblan las elecciones y probablemente se hará, deberá buscarse en electores independientes, no alineados, que optan por otras alternativas distritales, pero que a nivel nacional tienen buena opinión del gobierno y la Presidenta, cuya imagen positiva en la Capital Federal llega al 45%.

Un caso menor es Provincia de Buenos aires, donde los electores de Nuevo Encuentro que en 2009 votaron la opción de Martín Sabbatela como diputado contra la opción Kirchner-Scioli, en este contexto 2011, ya están votando nacionalmente por Cristina, por lo que funcionará el voto cruzado con o sin colectora , que no suma votos a Cristina, pero evetualmente sí le quitaría algunos votos a Daniel Scioli y a las instancias municipales.

Finalmente, esto supone que en la Ciudad y Provincia de Buenos Aires también, aunque más discretamente que en Córdoba y Santa Fe, la estrategia de voto cruzado es , si es que Cristina decide presentarse como candidata, la que se presenta en perspectiva como la más adecuada, de cara a las ya inmediatas elecciones ejecutivas del año 2011.