La asociación entre barras y delito, mediados por la política y el sindicalismo, es muy frecuente. Se trata de una franja lumpensocial (en Flores sur "Los cabezas de lata") que, como tarea habitual y bajo el despliegue de la subcultura del aguante -retazos de discurso fascistoide de gran contenido discriminador y otras lindezas-, administra semanalmente y como tarea principal eventuales conflictos surgidos entre hinchas y simpatizantes de una combinación determinada de colores (blanco, verde, azul, amarilla, blanca, roja) a cambio de múltiples negocios y conforma este nuevo subconjunto, muy activo a la hora de organizar el conflicto social en sentido amplio que desborda claramente el ámbito futbolero: los barra-bravas.
Tienen conexiones evidentes con las "fuerzas de seguridad", como en el caso por ejemplo de Nueva Chicago, donde se conformó relativamente de manera reciente la "Barra de la Antena", una creación articulada con la Policía Federal a fin de motorizar el conflicto con la barra histórica de "Los Perales", en una categoría en la que no se admiten hinchadas visitantes, y dan sustento al negocio de ofrecer seguridad a los clubes, que para un partido de media semana por ejemplo, supone una erogación de $50.000 por partido promedio.
Hay lumpenesociales organizados de manera diversa en "barras bravas", como señalamos, pero también en "movimientos sociales" --Quebracho, CCC, MIJP-- , articulados con dirigencias políticas y fuerzas policiales, y se muestran muy activos en el despliegue de conflictos como los planteados en el Indoamericano, más allá de toda la pátina discursiva conmovedora por cierto, de disputa por los "derechos de los inmigrantes", y el "contexto socioeconómico" muy desfavorable de la región en que operan (Soldati es una zona históricamente postergada de la City, y lo seguirá siendo, con mas de 30% de pobreza y 40% de tenencia irregular de viviendas, por citar dos indicadores sociales relevantes).
En rigor, son disputas que, al estallar, tienen su núcleo dinámico en la práctica de estos segmentos que dan volumen al conflicto. Es muy probale, incluso, que muchas de las bandas lumpensociales que se cruzan hoy en la disputa, ni siquiera residan en Soldati y provengan del conurbano.
Al respecto, y como muestra de la conexión entre grupos lumpensociales, política, sindicatos, en los episodios de Soldati, leemos:
Ayer por la tarde, antes de que la situación en el Parque Indoamericano de Villa Soldati/Lugano se pusiera peor de lo que estaba, se entregó Julio Carlos Capella, el jóven que apareció filmado por las cámaras de TV empuñando un arma y apuntando en dirección a las personas que ocupaban el Parque.
Capella es un barra de Huracán, miembro de la facción denominada "Plaza José C. Paz". Está casado con la hermana de Claudio 'Cone' De Respinis y Pablo 'Narigón' De Respinis, los dos jefes de la barra brava del Globo.
Trabaja en la Obra Social de los empleados del Gobierno de la Ciudad (OSBA), y fue miembro de la Junta Electoral en las elecciones generales de SUTECBA que se hicieron el año pasado....
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