Todos lo dicen, el sistema político nacional ha sido uno de los responsables centrales de la decadencia de la Argentina reciente, en su perfil socioambiental, de infrestructura, la penuria del medioambiente, en fin , lo que todos conocemos. Queremos entonces "nuevos partidos", soportes de la famosa "nueva política". Pues bien, una dimensión a considerar a la hora de analizar algunas de las variables que explican el funcionamiento del sistema de representación es sin duda la proliferación de sellos irrepresentativos. Normalmente presentados como "lo nuevo", constituídos muchos de ellos en verdaderas unidades de negocios de pequeños grupos, o Pymes de representación política local , ofertan su módica estructura a los partidos nacionales, tras cada elección y al mejor postor, obvio. Al respecto, para que se pueda dimensionar la escala de la debacle de representación política, y la proliferación de estas Pymes de la transa, con datos de la Cámara Nacional Electoral de noviembre de 2007, en el gráfico Nº1 que abre este post (click sobre la imagen para verla mejor) puede observarse el actual número de partidos políticos reconocidos, sean de orden nacional o distrital. Como se observara, sobre un total de 716 formaciones partidarias, sólo 47 tienen expresión nacional.
Los datos oficiales muestran la sobreoferta de dimensión local en la representación política nacional, y en el gráfico Nº2 (click sobre la imagen para verlo mejor), se observa en particular la anomalía del sistema de representación política, esta vez, desagregado por provincias. Sobre un promedio nacional de 18 formaciones partidarias cada millón de habitantes , la Patagonia, motorizado por su bajo número de residentes promedio y el NOA y el NEA debido a la proliferación creciente de partidos locales , están muy por sobre el promedio nacional de partidos por habitante. Sin embargo, el caso más llamativo resulta Capital Federal, que entre los distritos densamente poblados, posee el récord de sellos partidarios (67) para 2,9 millones de habitantes. Un promedio de 23 formaciones partidarias cada millón de habitantes, 27% por sobre el promedio nacional. La pregunta que aparece inevitable: Esta expansión notable del aparato local de representación política porteño , es una de las claves de la decadencia galopante de la Ciudad de Buenos Aires ? Para Ramble, of course! Mucho business la muchachada, no?
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