6/13/2016

run like hell



Empezó a frecuentar sectores influyentes ligados a la diplomacia. La interna con el dos del Palacio San Martín, que responde a Marcos Peña. ¿Misión cumplida del ex JP Morgan en Hacienda?Prev
Durante la misma jornada de balance que protagonizó la canciller Susana Malcorraluego de su paso por Nueva York (ver aparte"Malcorra volvió de Nueva York..."), el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso De Prat Gay, retomó una discreta e influyente campaña para posicionarse dentro del pelotón de funcionarios que pretenden sucederla al frente del Palacio San Martin en caso de resultar electa, en noviembre, secretaria general de la ONU.

Este miércoles, el ministro encabezó un almuerzo privado en la sede del Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI). De la cita participaron unos 20 comensales, presididos por el titular del organismo,Adalberto Rodríguez Giavarini, canciller del gobierno de Fernando De la Rúa y sobreviviente de la tragedia política de la Alianza.

“Fue un almuerzo de trabajo, pero la cita estaba prevista desde hacía un mes para un ministro como él, que es miembro del CARI y un habitué del organismo”, explicaron fuentes del influyente think tank que ya recibió en sus mesas a la canciller Malcorra, a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y a la diputada Elisa Carrió, que hace un mes también desempolvó sus ambiciones diplomáticas y almorzó con los diplomáticos en calidad de titular de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara baja.

Si bien el encuentro fue reservado, y sin acceso a la prensa, Letra P pudo saber que el ministro habló de la “importante coordinación que hay entre la Cancillería y su cartera en la construcción de una estrategia conjunta para conquistar nuevos mercados”. Los mensajes de De Prat Gay fueron interpretados como una discreta oficialización de sus ambiciones diplomáticas, un tema que el economista ya había planteado antes de aceptar el cargo que ocupa actualmente.

“No es ningún secreto que Alfonso quiere ser canciller, se lo dijo a Macri antes de asumir el Gobierno, pero luego terminó en Hacienda y Finanzas, un cargo que ahora quiere dejar luego de haber cumplido dos objetivos centrales: el fin del cepo y la negociación con los holdouts”, explicaron a este portal sobre las intenciones del ex ejecutivo del banco de inversión JP Morgan.

En el almuerzo, donde el ministro se despachó sobre más temas internacionales que económicos, participaron empresarios como Eduardo Eurnekian (Aeropuertos Argentina 2000), embajadores de carrera y especialistas que forman parte del organismo de estudios, como Felix Peña, titular de la Fundación del Banco ICBC y padre del actual jefe de Gabinete; el ex vicecanciller Fernando Petrella y el titular de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, Anibal Jozami, entre otros comensales.

Con el almuerzo en el CARI, Prat Gay puso en marcha su plan para posicionarse como un expectante candidato a suceder a Malcorra, con una ventaja a su favor, porque ya habría recibido la bendición de la canciller.

Dentro del gabinete económico sostienen que existe una “gran sintonía” entre De Prat Gay y Malcorra desde el principio. Algunos malheridos sostienen que fue el ministro de Hacienda quien alertó a la canciller del impacto que tendría para su gestión un decreto firmado por Macri a principios de su gobierno, cuando le había quitado todos los temas de Comercio Internacional al Palacio San Martín y los había dejado en la órbita del Ministerio de Producción, en manos del mendocino Francisco Cabrera. La medida fue revertida por Macri a pedido de Malcorra y con el auspicio de “Alfonso”. Curiosamente, sin hablar del enroque de atribuciones, este miércoles el ministro de Hacienda ponderó la importancia del comercio internacional, pero no dijo una palabra sobre las razones que mantienen acéfala a la estratégica Fundación ExportAR, que por algunos días dejó de depender de la Cancillería para que Cabrera dispusiera de su estructura.

La unción de Malcorra a favor de “Alfonso” juega en desmedro del secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo, el mismo que el miércoles por la noche partió junto a su jefe político, Marcos Peña, que voló a Washington para dialogar con la consejera de seguridad de la Casa Blanca, Susan Rice, y un elenco determinante para el futuro de Malcorra como el director para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, Mark Feierstein. La recorrida de Peña y Pompeo por la capital estadounidense incluye, según informaron fuentes de la Presidencia, “un encuentro con la embajadora Kristie Kenney, consejera del Departamento de Estado; con el jefe de Gabinete del secretario de Estado y director de Planificación Política, Jon Finer, y con el subsecretario adjunto de Asuntos Hemisféricos Occidentales, Francisco Palmieri”.

Dentro de Cambiemos, y también del Gobierno, admiten que las diferencias entre Pompeo y Malcorra son notables y tuvieron picos de tensión, como el posicionamiento que tuvo la canciller contra la utilización de la Carta Interamericana Democrática contra Venezuela, un tema promovido activamente por Pompeo y desautorizado por la canciller. Ahora que el primer round por la secretaria general de la ONU ya concluyó, se lanzó una nueva carrera de candidatos, donde algunos también anotan al propio Peña, por encima de las ambiciones de Pompeo, el hombre que tiene el respaldo de buena parte de los funcionarios diplomáticos que dejó el entonces canciller Carlos Ruckaufdurante el menemismo y que mueve sus fichas dentro del Palacio San Martin como un “virtual control de gestión” de la mujer que Macri eligió impulsar para disputar la secretaria general de la ONU.

La pelea recién comienza, pero el veredicto final se conocerá antes de diciembre, cuando el segundo semestre esté a un paso de terminar y el Presidente decida si recibirá el calendario electoral de 2017 con un nuevo gabinete. Para entonces ya sabrá si podrá contar con “Susy” o si tendrá que elegir entre los candidatos que ya empezaron a blanquear sus ambiciones.

No hay comentarios.: